Editorial
La distribuidora farmacéutica Cofares prescinde de dos consejeros, ante la sospecha de que acaparaban vacunas contra la meningitis B, identificadas bajo la marca Bexero. No se puede acusar a Cofares de tomar tan contundente medida con precipitación. Previamente, impulsó una investigación interna que reveló cómo las dos personas despedidas acumulaban en farmacias de su propiedad seis veces más cantidad de Bexero de la estipulada.