Treinta minutos. Ese fue el tiempo que le bastó a la compañía japonesa para meterse en el bolsillo a los actuales usuarios de Nintendo Switch, pero también a aquellos que todavía no habían hecho con la consola. La empresa contentó a los fans de las franquicias exclusivas con nombres propios. Por un lado tenemos una futura expansión para Splatoon 2, ampliando así el contenido para un jugador, y a buen seguro cuantiosos extras que extiendan la vertiente multijugador.

El 2018 será un año clave para Microsoft, concretamente para la marca Xbox. Nintendo ha encarrilado su futuro gracias a las apabullantes ventas de Switch y con altas perspectivas con sus próximos juegos. Por otro lado, Sony no se queda atrás. Y es que aunque PlayStation 4 Pro no esté a la altura técnica de Xbox One X, bastan las franquicias como The Last of Us, God of War o Spiderman para garantizar un 2018 prometedor en la empresa japonesa.

En plena era de la tecnología, con la realidad virtual a medio camino de estar asentada; los controles por movimiento y la realidad aumentada ganando adeptos con cada nuevo proyecto que se presenta, Nintendo ha dado un completo giro de tuerca con el que será su nuevo proyecto: Nintendo Labo.

Aunque Sony y Microsoft suelen emplezarnos al E3 celebrado en junio como primera gran toma de contacto y espectáculo de cara a los próximos lanzamientos, Nintendo se ha adelantado a sus rivales. Por sorpresa y sin previo aviso, la compañía japonesa celebraba un denominado MiniDirect en el que desvelaban varios de los títulos que estarán presentes en Nintendo Switch durante las siguientes semanas.