El maño será recordado por su mítica frase: "¿Quién me pone la pierna encima?"
La televisión cambió para siempre en España con la llegada de Gran Hermano, el primer formato de telerrealidad que encerró a un grupo de personas anónimas en una casa llena de cámaras. Jorge Berrocal, un joven de 25 años que había dejado el Ejército, fue una de ellas.