Enrique Peña Nieto fue alertado en 2015 sobre el daño que implicaba a México la compra de Fertinal, y de todas maneras presionó para que la operación se realizara, de acuerdo con una declaración de Emilio Lozoya Austin, exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), a la que la revista Proceso tuvo acceso.