La imagen de la reina Isabel II caminando por el pasillo central de la abadía de Westminster junto a su hijo Andrés ha levantado ampollas, incluso dentro de los Windsor. El funeral del duque de Edimburgo, el pasado 29 de marzo, sigue dando titulares. En The Firm (como se conoce a la familia) hay discrepancias en torno a esta fotografía.