Zaragoza
DIMA, empresa de ingeniería médica, invertirá alrededor de 250.000 euros en una nueva nave en el polígono industrial Mediavega de Calatayud (Zaragoza), que destinará para la actividad relacionada con su línea veterinaria de fabricación de ligamentos sintéticos para perros o productos para operaciones de testículos en potros. La empresa prevé crecer este año un 10%.
La empresa bilbilitana DIMA sigue creciendo. Especializada desde hace 20 años en el sector de la ingeniería médica, está desarrollando un nuevo proyecto para el sector veterinario en el que lleva cerca de cuatro años investigando y para cuyo desarrollo y crecimiento está ampliando sus instalaciones en la localidad zaragozana de Calatayud.
En concreto, DIMA está construyendo una nueva nave de 300 metros cuadrados construidos en la que se realizará una inversión que rondará los 250.000 euros, según ha indicado Francisco Farrer, director de DIMA, a elEconomista.es
Esta nave, anexa a las actuales instalaciones y que está situada dentro de la parcela de 3.000 metros cuadrados que tiene la compañía en Calatayud, se localiza en el polígono de Mediavega de esta localidad zaragozana. La previsión es que pueda estar ya acabada a finales de este año, fecha en la que se prevé que comience también a trabajar en ellas.
En esta nave, que se está terminado de construir, DIMA desarrollará principalmente la línea de veterinaria, que la compañía comenzó a comercializar hace un año a nivel internacional.
En concreto, esta actividad se centra en la fabricación de ligamentos sintéticos de última generación para perros, que permiten la reconstrucción del ligamento cruzado craneal de canes.
Además, ha lanzado otro producto destinado a las operaciones de testículos en potros que hace más fácil la laparoscopia en caballos para que las cirugías sean más sencillas. Un producto que ha sido estudiado en colaboración con la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Zaragoza y que obtuvo el segundo premio Triple Hélice que concede esta institución académica.
Esta línea de actividad se ha puesto en marcha ante la demanda que había en el sector y la poca industria existente en España. "La tecnología que tenemos para uso médico en España, la podemos aplicar a perros con menos requisitos", que cuando se destina a humanos. "Nos encontramos con las necesidades que tenían los veterinarios y para nosotros era sencillo hacerlo".
Estos productos para el sector veterinario complementan la actividad de la empresa que comenzó con la fabricación de productos para el sector textil médico para ampliar de forma progresiva su portfolio, además de sentar las bases para continuar impulsando el crecimiento de la empresa. El año 2017, se cerró con un crecimiento de entre el 15% y el 20%. El objetivo para 2018 es seguir creciendo a un ritmo del 10%.
DIMA cuenta con una plantilla de 30 personas. La previsión es que se pueda generar empleo con las nuevas instalaciones. "Ahora hemos consolidado 30 empleos. Siempre un aumento de la actividad, conlleva aumento de empleo", estando previsto que se pueda llegar a los 35 trabajadores aproximadamente, aunque todo dependerá de las oscilaciones del mercado.
Los planes de la empresa y el estado de construcción de la nave han sido dados a conocer al alcalde de Calatayud, José Manuel Aranda, quien ha visitado recientemente las obras de ampliación de DIMA.
