
Las pymes podrán optar a esta financiación para impulsar proyectos innovadores que permitan realizar una mejor gestión y conseguir una mayor eficiencia de agua y energía, aplicando tecnologías facilitadoras esenciales. Una oportunidad que se canaliza a través del Cluster para el Uso Eficiente del Agua-ZINNAE y el Cluster Aragonés de Alimntación dentro del proyecto VIDA dentro de la convocatoria Horizonte 2020 de la Comisión Europea.
Y dentro de esta convocatoria competitiva a la que se presentaron un total de 94 solicitudes de las que solo cuatro fueron aprobadas (ratio de aprobación del 4,25%), se enmarca el proyecto VIDA del que forman parte los dos clusteres aragoneses, así como otros socios -hasta un total de once-, de siete regiones de siete países europeos entre los que se encuentran además de España, a través de Aragón, Italia, Alemania, República Checa, Portugal y Dinamarca.
El proyecto VIDA contará con un total de 3,3 millones de euros, que se destinarán a financiar proyectos innovadores de las pymes en el sector de la agroalimentación, prestando especial atención a la mejor gestión y eficiencia en la utilización de recursos como el agua y la energía para lo que se podrán aplicar tecnologías facilitadoras esenciales como, por ejemplo, la nanotecnología, plasma, fotónica o materiales avanzados.
El objetivo es así "dotar de valor añadido a la cadena alimentaria, trabajando en el nexo de agua, energía y tecnologías facilitadoras esenciales", según ha explicado Marisa Fernández, gerente de ZINNAE, quien ha añadido que este proyecto "nos coloca en la Champions League de los clusteres europeos".
Los proyectos que se podrán financiar están relacionados con la comercialización, desarrollo, experimental, validación tecnológica y consultoría, estando previsto que alrededor de 55 proyectos se financien dentro de las convocatorias que se van a habilitar en los próximos tres años y a las que podrán concurrir pymes -no solo las que pertenecen a estos clusteres-, que tendrán la oportunidad de participar en iniciativas que se desarrollen con entidades de las otras regiones participantes.
Los proyectos percibirán una dotación económica de entre 5.000 euros y 250.000 euros y se dispondrá de cuatro mecanismos diferentes para apoyar la innovación y la eficiencia, los proyectos consorciados y proyectos individuales.
Estos cuatro mecanismos se corresponden con la consultoría estratégica en ámbitos ligados a la gestión de la innovación, la validación tecnológica de soluciones que contribuyan a optimizar procesos y el uso del agua y energía asociada, proyectos consorciados para proyectos de validación técnica en consorcio y proyectos de desarrollo experimental a mayor escala que se llevarán a cabo a través de consorcios.
Estos mecanismos de financiación permitirán afrontar diez retos del sector, aunque ya se han detectado importantes oportunidades de colaboración para las empresas en el sector agrario para conseguir la eficiencia de agua en la agricultura por la elevada cantidad que se consume, "a pesar de los grandes esfuerzos ya realizados y para lo que se podrán utilizar nuevas tecnologías que no están implementadas como la sensórica para medir la humedad del suelo, tecnologías de membrana para aprovechar las aguas de depuradoras o los bombeos solares" con energía fotovoltaica (tecnología fotónica), ha añadido Clara Presa, Project Manager de Zinnae.
Otro de los nichos de oportunidad detectado se centra en la industria agroalimentaria, que también emplea grandes cantidades de agua. En esta línea, se barajan iniciativas centradas en sistemas de medición de la calidad del agua y procesos de depuración de las aguas residuales. "La tecnología es costosa -ha matizado Clara Presa-, pero ahora hay impulso para hacer cosas diferentes".
La gestión de purines es otro de los retos que se puede abordar dentro de este proyecto para hacer nuevos ensayos y conseguir un uso más seguro de estos residuos y aplicaciones antes de su uso como fertilizante.
Los proyectos que se lleven a cabo dentro de VIDA permitirán que el sector agroalimentario y las pymes den un salto importante en innovación en un momento en el que la I+D+i en España se encuentra por debajo de la media europea, contribuyendo así a impulsar la eficiencia en energía y el agua, "que son importantes en el sector agroalimentario", ha explicado María Eugenia Hernández, gerente del Cluster de Alimentación de Aragón, quien ha añadido que estos objetivos se alinean también con el medioambiente y con la propia cuenta de resultados de la empresa.
Además, las empresas podrán acceder a tecnologías que no se aplican en España o no están lo suficientemente introducidas, aunque son una realidad en otros países, aparte de avanzar en su proceso de internacionalización a través de las sinergias dentro de las colaboraciones con empresas de otros países. Y es que el objetivo es facilitar el contacto entre ellas a través de mecanismos online o físicos.