La organización agraria ha denunciado que los daños causados por la fauna salvaje se han acentuado con motivo del temporal de la semana pasada.
Dentro de estos daños, Asaja Huesca señala los sucedidos en la zona pirenaica donde los jabalíes han provocado cuantiosos destrozos en campos sembrados de forraje para el ganado.
Además, la elevada presión que causa la fauna salvaje sobre los campos de cultivo de de la provincia oscense se ha visto incrementada en esta última semana con motivo del fuerte temporal de nieve sufrido en la comunidad aragonesa, ya que la imposibilidad de encontrar alimento en el monte ha llevado a estos animales a buscarlo en los cultivos, causando daños que no solo se limitan al forraje consumido, sino también a los destrozos en los terrenos para obtenerlo.
Desde Asaja explican que los surcos que abren en el terreno con el hocico para obtener el alimento dificultan las labores de siega del forraje en la primavera y verano, llegando en los casos más graves a no poder segar estas parcelas, generando una pérdida económica al ganadero. Además, en otras parcelas, se ha comprobado como los jabalíes han comido directamente las semillas de forrajes que los ganaderos sembraron antes de la llegada del temporal.
Además, las grandes manadas de corzos y ciervos, "si bien no causan los destrozos que hacen los jabalíes, sí que pueden llegar a acabar con parcelas enteras de pradera o cultivos, debido a su elevado número y a los muchos días que acuden a comer. En estos casos los cupos existentes para su caza impiden un control eficaz de estos animales", añaden desde Asaja Huesca.
La organización, ante esta situación, ha querido denunciar "una vez más los elevados daños que la fauna salvaje (corzos, ciervos, jabalíes y conejos) causan en los cultivos de la provincia de Huesca, que en algunas zonas han obligado a los agricultores a abandonar determinados cultivos o a vallar sus parcelas para impedir la entrada de estos animales, con el elevado coste que esto supone".
También exigen "que se tomen medidas para evitar estos daños, y que no pasen por reducidas compensaciones económicas que no sirven más que para enfrentar a agricultores y cazadores".
Para Asaja Huesca, la ampliación de los periodos de caza y el control de la natalidad de estas poblaciones de fauna salvaje deben contemplarse como instrumentos para disminuir el censo de estos animales, ya que "de continuar esta situación, se producirá el abandono de la actividad agrícola en zonas de alto valor medioambiental".