Tras el cierre de la operación de compra de Opel y Vauxhall por parte del Grupo PSA, ahora las firmas deben elaborar un plan estratégico o de viabilidad para ser rentables en 2020 ante el que los sindicatos están a la expectativa.
Este plan será elaborado por Opel y Vauxhall, en colaboración con PSA, y se prevé que se presente en el plazo de 100 días con el objetivo de que el negocio europeo de Opel vuelva a los números negros y, en concreto, se genere un cash flow operacional positivo en 2020 y un margen operativo del 2% en ese ejercicio, que se quiere elevar al 6% en el horizonte de 2026.
Un plan ante el que los sindicatos en la planta de Opel España en Figueruelas (Zaragoza), están ante la expectativa, aunque no prevén que introduzca importantes cambios puesto que la factoría zaragozana ha demostrado que es competitiva y tiene una buena posición dentro del negocio de Opel en Europa. Además, ya trabaja en dos modelos con PSA: el Crossland X y el Citroën C3 Aircross.
La presidenta del comité de empresa del Opel España, Sara Martín, ha señalado a elEconomista.es que están "expectantes" ante el plan de desarrollo del que no se ha facilitado hasta el momento ninguna información a los sindicatos ni a la plantilla.
Sin embargo, en la planta de Figueruelas, que ahora está cerrada por vacaciones de verano, hay tranquilidad. "Estamos centrados en lanzar el Citroën C3 Aircross", que se empezará a producir en Zaragoza a finales del mes de agosto y que va a permitir "demostrar el trabajo" que se hace en la planta.
"La operación -ha añadido Sara Martín- es positiva. El hecho de adelantar el cierre de la operación es positivo porque somos la primera planta que trabaja con producto de PSA. Figueruelas siempre ha demostrado que es rentable y productiva y que lo va a seguir siendo. Ya el lanzamiento del Crossland X fue la carta de presentación y, ahora con el Aircross, PSA va a poder comprobar que no fue un formalismo y que en Zaragoza hay buenos trabajadores y competitivos".
Una opinión que también ha sido secundada por el secretario de la sección sindical de UGT Aragón en Opel España, Pedro Bona, quien ha manifestado que la valoración de la operación "es positiva. Ya no somos GM, pero es de agradecer que tras años en números rojos se haya facilitado continuar como marca Opel y Vauxhall", ha indicado a elEconomista.es
Bona ha señalado que "ahora hay una puerta de esperanza porque PSA es un grupo fuerte. Es el segundo fabricante de Europa con una cuota de mercado del 17%o 18% y abre oportunidades. En UGT vemos que puede ser positivo para mantener la marca y el empleo".
De hecho, Figueruelas parte de una buena posición, puesto que la planta supone el 45,3% de toda la producción de Europa. "A corto y medio plazo estamos tranquilos. El Aircross se va a fabricar tras las vacaciones y el nuevo Corsa se producirá en exclusiva en Zaragoza en 2019".
La operación también puede tener otros efectos positivos para la planta de Figueruelas porque con "PSA vamos a tener más apertura de mercados. Por ejemplo, el Corsa antes no lo podíamos llevar a Estados Unidos", ha añadido Pedro Bona.
"No estamos preocupados por la compra. Somos competitivos siendo Opel y somos competitivos con independencia del logo", ha afirmado José Juan Arcéiz, secretario general de FICA UGT Aragón, a elEconomista.es Además, también ha incidido en la ventaja de la planta de Figueruelas al trabajar ya con producto producido para PSA. "Se sabe lo que les gusta y cómo trabajan y esto habrá que extenderlo a otras líneas".
Por su parte, la secretaria general de la Federación de Industria de CCOO Aragón, Ana Sánchez, ha afirmado a elEconomista.es que "para nosotros no supone ningún cambio. Estamos con dos modelos que son fruto del acuerdo de colaboración con PSA: el Crossland y el Citroën C3 Aircross. Hay continuidad".
Además, también está adjudicado el Opel Corsa del que se ha confirmado que se hará bajo la plataforma de PSA y solo quedaría por saber donde se fabricará el nuevo Opel Adam, que podría ir por la misma plataforma que el Opel Corsa.