En la comunidad aragonesa hay alrededor de un centenar de centros homologados para los que se pide una solución que garantice su supervivencia y el mantenimiento de los más de 600 empleos.
Esta preocupación se ha mostrado en el seno del Consejo Aragonés de Cámaras -que está integrado por las cámaras de comercio de Huesca, Zaragoza y Teruel-, que ha querido mostrar su apoyo a los Centros de Educación Infantil de Aragón ante el proyecto de incluir el primer ciclo de Educación Infantil, de 0 a 3 años, en los colegios.
Desde el Consejo Aragonés de Cámaras se indica que, pese al esfuerzo e inversiones realizadas en estos años para cumplir las especificaciones del Gobierno de Aragón en materia de seguridad, ratios, instalaciones y proyecto educativo, la creciente presencia de centros no homologados ya ha comprometido la viabilidad de muchos de ellos.
En este sentido, señalan que si ahora se trasladase a los colegios ese primer tramo educativo abocaría a los CEI a abandonar su actividad, con la consiguiente y grave pérdida de empleos.
A través de su homologación y de las inspecciones a las que se someten, los CEI garantizan que los niños de 0 a 3 años reciben la mejor educación posible, en el entorno adecuado y con las condiciones idóneas.
Además, constituyen un sector de actividad que genera riqueza y empleo. En concreto, hasta 632 puestos de trabajo se verían directamente amenazados si no se busca una solución viable.
