Las empresas son conscientes de que deben abordar la transformación digital, aunque en España y en comunidades como Aragón todavía son reticentes por la resistencia al cambio y porque no se ve como una oportunidad para generar más oportunidades de negocio.
La transformación digital ha venido para quedarse. Las empresas son cada vez más conscientes de ello y de la necesidad de dar ese salto a lo digital, aunque en España "se está a medio camino. Se es consciente de que se tiene que hacer, pero hay mucho camino por recorrer", según ha explicado David Franco, Product Manager de Páginas Amarillas durante su ponencia 'No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy', que ha impartido en la jornada Impulsando Pymes 2017, que se ha celebrado en Zaragoza, en declaraciones a elEconomista.es
Pero esta mentalidad sobre la importancia y necesidad de abordar la transformación digital no se registra en todas las empresas por igual ni en las comunidades autónomas.
De hecho, precisamente, Aragón es una de las autonomías en las que "se está por debajo" por ejemplo, en "inversión en publicidad digital, que debería ser más fuerte", aunque en estudios sobre micropymes se ve una mayor concienciación en los últimos cinco años, así como en la necesidad de "contar con profesionales y no hacerlo todo por sí mismos".
Este retraso al abordar la transformación digital se debe a varios factores, aunque el principal es que existe "un desconocimiento cultural en España de para qué me va a servir y se cuestiona si va a merecer la pena".
Además, "está la barrera del miedo, de la resistencia al cambio", a pesar de que debería verse "como una estrategia que genera oportunidades de negocio" para lo que es preciso saber que "sale a cuenta tener una estrategia digital".
Tres pilares
A pesar de la falta de profesionales relacionados con el ámbito digital o las nuevas tecnologías que denuncian muchas empresas, realmente este no es uno de los principales handicaps.
"Profesionales hay. Es importante que las empresas se den cuenta de que hay que ficharlos y no esperar a que el cambio tenga que venir, por ejemplo, por un virus para fichar a un profesional en ciberseguridad". Además, los profesionales no siempre tienen por qué ser internos, sino que se pueden tener asesores "igual que para los impuestos" o los temas fiscales.
Una vez que ya se cuenta con los profesionales, las empresas deben tener en cuenta tres pilares: la web, presencia en redes sociales y tenerlas como canal de comunicación. Para ello hay que "tener un buen asesoramiento que tenga que ver con qué soy y dónde estoy, los objetivos..." para diseñar una estrategia teniendo en cuenta que "estoy en Aragón, resolviendo necesidades locales...".
Y, sobre todo, hay que elegir bien las redes sociales en las que se tiene que estar y que forman parte de esa estrategia. "Una empresa tiene que estar donde sus clientes están. Hay canales nuevos que salen todos los días".
Aunque siempre se tiende a pensar en las más populares como Facebook o Twitter, no hay que perder de vista Snapchat si la empresa se dirige a un público más joven, por ejemplo. Muchas empresas tienden a destinar presupuesto para radio, prensa... "que también los clientes están aquí, pero igualmente es efectivo que el cliente te vea al encender el móvil".
Y, en todo este proceso, se recomienda contar con un buen asesoramiento porque "es inabordable si no se cuenta con ayuda. Todo cambia rápido y hay que adaptarse. Hoy es Snapchat, pero mañana puede ser otro" canal.