El Indicador de Confianza Empresarial (ICE) recoge una tasa positiva (+6), aunque todavía hay factores de competitividad en los que caben mejoras. En materia de empleo, las previsiones todavía no son tan halagüeñas puesto que la mayoría de las empresas aragonesas precisa crecer un 5% para contratar a más trabajadores.
Son los principales datos del Indicador de Confianza Empresarial (ICE) en el que se observa un cambio de tendencia, ya que por primera vez desde el inicio de la crisis se sitúa en una tasa positiva (+6).
En el último ICE se recogen los resultados de las empresas en el tercer trimestre de 2015 y las perspectivas para el último, de manera que el índice de situación (de julio a septiembre), alcanza el 8,5 mientras las perspectivas de octubre-diciembre quedaron en el 3,5.
Las empresas aragonesas reflejan así una mayor confianza empresarial, según los datos aportados por la Fundación Basilio Paraíso de la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Zaragoza en cuyo panel de opinión se pone de manifiesto que el crédito, la fiscalidad, la contratación y la venta por Internet son factores de competitividad estratégicos para la recuperación económica.
En relación a estos factores, las empresas aragonesas apuestan por una fiscalidad más simplificada. Además, el 80% de las compañías estaría dispuesta a apoyar la eliminación de deducciones y bonificaciones y exenciones fiscales a cambio de una rebaja de los tipos impositivos y de una simplificación del marco tributario.
Las empresas aragonesas reconocen una mejora de las condiciones de acceso al crédito -lo que indica el 70%-, en comparación con el ejercicio de 2015. Un porcentaje que se eleva hasta el 74,2% en el caso de la industria, pero que desciende hasta el 63,3%, en el sector servicios.
No obstante, la mayoría de ellas -el 46%-, todavía no tiene capacidad para aumentar la plantilla y se estima que necesitarían crecer en torno a un 5% para contratar a un trabajador nuevo. Además, un incremento en la facturación de entre el 10% y el 25% animaría al 27% de las empresas a contratar nuevos trabajadores.
Finalmente, en relación al comercio electrónico, se constata que solo el 11% de las empresas aragonesas vende más del 5% de su facturación a través de Internet, siendo el canal que más crece y que presenta mayor potencial de desarrollo.
No obstante, la actividad varía según el sector. El comercio electrónico solo llega al 8% de las industrias aragonesas, mientras que en el sector servicios el porcentaje se sitúa en el 16,7%. Destaca que más del 60% de las empresas no se plantea vender por Internet.