La delegación zaragozana de TSB-Transabadell ha inaugurado hoy sus nuevas instalaciones en Zaragoza con las que podrá ofrecer más servicios y de más calidad a las empresas con el fin de aumentar su presencia en el sector del transporte.
Las nuevas instalaciones de la empresa, especializada en paquetería industrial y logística integral, están ubicadas en el Polígono Malpica de Zaragoza y se suman a las que anteriormente tenía TSB en la localidad zaragozana de Alfajarín y que seguirán activas, pero realizándose otros usos como la logística industrial.
El nuevo centro de trabajo de la empresa, que se ha inaugurado hoy, está ubicado sobre una parcela de 9.500 metros cuadrados de los que 3.300 metros cuadrados están dedicados a almacén, que se destinará principalmente a las actividades de cross-docking. En total, cuentan con un 36 muelles de carga.
TSB pasa así a disponer en Zaragoza de casi 9.800 metros cuadrados de almacén de los que alrededor de 4.400 metros cuadrados se destinan a cross-docking, mientras que 5.400 metros cuadrados son de almacén logístico, teniendo una capacidad de 9.000 huecos de palets. Además, 740 metros cuadrados son de oficinas.
La nueva sede, en la que se ha realizado una inversión de 85.000 euros para adecuar las instalaciones, permitirá crecer a TSB, ya que el centro de Alfajarín "se nos ha quedado pequeño", según ha explicado Jesús Jiménez, gerente de TSB Zaragoza, a elEconomista.es
Con las nuevas instalaciones, la compañía podrá ofrecer más servicios a las empresas y de mayor calidad. De hecho, el objetivo de TSB es abrir "nuevas rutas directas con las que se mejorará el servicio porque se reducirán los plazos de entrega y no se manipulará la mercancía, que sufrirá menos". Con estas rutas directas también se podrán reducir costes.
Además, la empresa quiere hacerse un hueco mayor en el mercado en el que hasta ahora ha venido trabajando sobre todo para multinacionales "que son muy exigentes en calidad".
La nueva sede permitirá "llegar a más clientes" locales y aumentar su presencia en Aragón, así como incrementar las rutas internacionales, que hasta ahora tienen una menor presencia en la actividad de la compañía en Zaragoza que, sobre todo, ha venido centrándose en rutas en la Península Ibérica, que suponen el 90% del total.
La apertura de la nueva sede también se traducirá en más empleo. De momento, ya se han generado cuatro puestos de trabajo, sumando una plantilla de 42 empleados, aunque la intención es seguir generando más empleo.
La empresa, que está presente en Zaragoza desde 1991, lleva en la actualidad más de 160.000 expediciones al año con un total de 100 millones de kilos.