La presidenta de Aragón ha participado en la celebración del XXXVI Día de la Constitución Española que ha tenido lugar hoy en la sede de la Delegación de Gobierno. Un acto en el que ha señalado que antes de reformar la Carta Magna hay que conocer qué se quiere reformar, con qué objetivo y con qué consenso contaría.
Durante su intervención, la presidenta del Gobierno de Aragón ha recordado la fecha y la aprobación de la Constitución España, momento del que ha indicado que ha supuesto "un punto de inflexión en la Historia de España y en el devenir de los últimos siglos" porque "permitió una Constitución para todos, sin ansias de imposición o hegemonía".
Rudi ha explicado que la Constitución Española "fue fruto de un objetivo común y de un intenso trabajo en la búsqueda de acuerdos para dar solución a los problemas históricos de nuestro país".
En ese sentido, la presidenta ha afirmado que ahora "no se puede, de manera infundada y poco responsable, negar mediante una enmienda a la totalidad a la Transición lo evidente: que España y los españoles hemos vivido durante los últimos 35 años la etapa de mayor avance político, económico y social de los últimos siglos".
Rudi también ha hecho referencia a una posible reforma de la Carta Magna. "La Constitución puede ser reformada y los procedimientos para ello están contenidos en la misma. Ni es sagrada ni inamovible, e incluso podría ser aconsejable la actualización de algunos de sus preceptos", si bien ha incidido en que "sigue siendo válida. En lo sustancial continúa estando en pleno vigor".
La presidenta ha explicado que el Ejecutivo autónomo que preside mantiene firme su idea de que antes de realizar ningún cambio hay que tener las respuestas a qué se quiere reformar, qué objetivo se persigue y qué mayoría concitaría dicha reforma. En este sentido ha afirmado que es fundamental que de esa "hipotética reforma no pueden resultar quebrantados los principios de igualdad y solidaridad, que, entre otros, impregnan el actual Texto Constitucional".
Además, Rudi ha rechazado cualquier cambio que suponga "reconocer las singularidades y hechos diferenciales de algunas comunidades autónomas porque ello daría lugar a comunidades de primera y de segunda", lo que "no daría satisfacción a quienes quieren romper la unidad de España y generaría agravios comparativos entre el resto de españoles. Los aragoneses no serán menos que nadie", ha afirmado para añadir a continuación que sería conveniente que tuviera un consenso mayoritario de toda la sociedad española.
Luisa Fernanda Rudi ha hecho referencia también a la corrupción. En este sentido, ha indicado que "me niego a calificar de corrompido el sistema". Para la presidenta, los representantes públicos deben empeñarse en que los ciudadanos vuelvan a tener confianza. En esa línea, ha recordado el Código del Buen Gobierno, la Ley de Transparencia -que ha puesto en marcha su Gobierno- y el gran pacto por la regeneración democrática que ha propuesto.
"La historia reciente nos demuestra la capacidad como nación de ganar nuestro futuro, aun en las condiciones más difíciles. Ello refuerza mi convencimiento de que volveremos a salir airosos de este empeño", ha concluido Rudi.