Grupo Grasa amplía sus líneas de negocio con la piedra de Calatorao. Un material que se ha venido utilizando desde hace años en la decoración de interiores y exteriores y que, ahora, se quiere impulsar con la creación de la marca Gramablack. El objetivo es poner en valor nuevamente esta piedra, con características especiales, no solo en España, sino también en los mercados internacionales.
Grupo Grasa, cuya actividad ha estado centrada tradicionalmente en los áridos redondos para el sector de la construcción, ha puesto en marcha una nueva línea de negocio centrada en la piedra de Calatorao tras la adquisición de la Cantería CIM, que ha venido trabajando este material desde hace años.
"Tras la jubilación de los propietarios, hemos adquirido la cantera con el objetivo de continuar con el mismo concepto de trabajar la piedra de Calatorao y con el fin de darle más visibilidad y darle nombre internacional", manteniendo a su vez los puestos de trabajo, según ha explicado Javier Grasa, CEO del Grupo Grasa, que se encuentra en la cuarta generación, a elEconomista.es
Con la adquisición de esta cantería, Grupo Grasa diversifica su actividad al adentrarse en este segmento de actividad con Gramablack, denominación comercial para la línea de piedra de Calatorao. Un producto único en el mundo y que ha sido muy utilizado en la construcción de templos o iglesias o en la restauración de edificios históricos como la Iglesia de la Magdalena en Zaragoza, aparte de haberse empleado para la ornamentación interior y exterior.
Sin embargo, en los últimos años y tras la severa crisis, la utilización de esta piedra descendió porque "el mercado decidió ir a otros materiales más baratos" y no utilizar este material de "mucha calidad". La piedra de Calatorao se caracteriza por ser una piedra marmórea con mucha dureza que, además, presenta la particularidad de que se convierte en negra al pulirla. También es un material de alta durabilidad, puesto que hay piedras colocadas desde hace más de 500 años, ya que ha sido empleada por diferentes culturas.
El objetivo ahora de Grupo Grasa es continuar con esta actividad, pero también "optimizar más líneas y darle enfoques más originales y urbanos", de manera que la piedra de Calatorao se emplee a su vez para la decoración interior y exterior de casas para suelos y paredes, encimeras de cocinas o baños, mobiliario... con una línea específica, además de apostar por su empleo en zonas exteriores para paisajes, mesas y bancos o fuentes, entre otras posibles utilizaciones.
Son líneas en las que no solo se quiere ahondar en el territorio nacional -los principales clientes son Zaragoza y Aragón, así como Navarra, Soria o La Rioja-, sino también en los mercados internacionales. "Hemos trabajado en Francia estos años, pero no hemos ido más allá. Nuestra intención es analizar el mercado e ir viendo la posibilidad de abrirlos para llevarla a todo el mundo. La idea nos ilusiona enormemente porque llevar la piedra a todo el mundo significa poner un pedazo de Aragón. Es un producto que forma parte de la cultura aragonesa".
La piedra se comercializará a través de diferentes canales, poniendo el foco sobre todo en los clientes que la demanden para hacer una obra o para profesionales como arquitectos, aparte de poder ser utilizada también en proyectos de ayuntamientos -entre otras instituciones-, y empresas contratadas para acometer obras.
"También queremos vender a distribuidores localizados en países en los que decidamos estar a corto y medio plazo. El objetivo es ambicioso. Queremos tener una red propia de distribuidores nacionales e internacionales". Además, se realizará la comercialización online bajo pedido de piezas que sean diferentes para decoración de casas o exteriores, entre otras posibilidades.
El Grupo
Con la creación de esta línea y la marca comercial Gramablack, Grupo Grasa avanza en la diversificación de su actividad, que comprende la actividad centrada en el árido redondo para construcción, aparte de disponer de equipos de movimiento de tierras, excavadoras y trabajar en el sector de los pavimentos. Además, tiene inversores en otros sectores de actividad y es promotor de edificaciones fuera de Zaragoza
El grupo, que viene realizando una importante apuesta por la I+D+i, ha aumentado su volumen de facturación desde 2016 a 2018. "En mayo de 2019, hemos facturado igual que en todo 2018". Además, las inversiones han experimentado un aumento "potente desde 2017 y 2018". En 2019, se han destinado alrededor de 1,32 millones de euros a maquinaria e instalaciones. En términos porcentuales, las inversiones han crecido un 156%.