La conocida como Cuarta Revolución Industrial o Industria 4.0 ha llegado al sector de la construcción en Andalucía y las empresas están comenzando a utilizar herramientas innovadoras para crear construcciones más eficientes. La multinacional malagueña Sando, pionera en aplicar avances tecnológicos en sus trabajos, se encuentra ya inmersa en el proyecto Rebecca con el que pretende acercar la inteligencia artificial a la construcción.
La conocida como Cuarta Revolución Industrial o Industria 4.0 ha llegado al sector de la construcción en Andalucía y las empresas están comenzando a utilizar herramientas innovadoras para crear construcciones más eficientes. La multinacional malagueña Sando, pionera en aplicar avances tecnológicos en sus trabajos, se encuentra ya inmersa en el proyecto Rebecca con el que pretende acercar la inteligencia artificial a la construcción. El grupo Sando va de la mano con la consultora Grant Thornton en este proyecto de investigación, cofinanciado por la Corporación Tecnológica de Andalucía (CTA), que pretende crear un sistema inteligente para para aplicar la metodología BIM (Building Information Modeling) a la construcción de forma automática.
BIM es una metodología colaborativa para la gestión de proyectos de edificación y obra civil a través de un modelo digital 3D y conforma una gran base de datos para gestionar los elementos de una infraestructura durante todo su ciclo de vida. Estas tecnologías ya están sustituyendo a las herramientas CAD a nivel mundial.
Lo que Sando y Grant Thornton pretenden con el desarrollo del proyecto Rebecca es crear un sistema de reglas y algoritmos de inteligencia artificial que trabajen sobre la base de datos de BIM para mejorar el control y la monitorización de los proyectos de construcción.
"Al igual que nos ocurrió con los drones, que fuimos pioneros en el sector de la construcción hace casi una década, el proyecto Rebecca nos permitirá ir un paso adelante en la tecnología y aplicar una metodología inteligente en todo el proceso. Esto hará posible que seamos más eficientes, rápidos y seguros a la hora de abarcar cualquier proyecto", indica a elEconomista Andalucía Juan Antonio Báez Durán, director de I+D+i en Sando.
Esta investigación facilitará que Sando ofrezca unos servicios únicos en BIM que incrementen la calidad de los proyectos y se puedan adaptar rápidamente a los requerimientos del cliente, aumentando la eficiencia y constituyendo una ventaja competitiva al reducir plazos de ejecución y costes operativos.
La constructora ya lleva un par de años aplicando la tecnología BIM, pero con este proyecto se va a poder involucrar el conjunto de la empresa para optimizar los procedimientos y dar una respuesta al cliente más ágil, completa y profesional gracias a la inteligencia artificial.
Rebecca, además, va a posicionar a Sando en una posición de referencia en el uso de estas tecnologías. " Este proyecto va a suponer posicionarnos como una empresa de referencia en el sector de construcción en el uso de la tecnología BIM y estar preparados para el cambio global que habrá en la forma de llevar a cabo infraestructuras civiles y edificaciones", destaca el director de I+D+i.
El responsable del sector Edificación y Obra Civil de CTA, Carlos García, afirma que "Rebecca es un ambicioso proyecto de transformación digital que supondrá un antes y un después para Sando". En su opinión, "la aplicación de la tecnología BIM hará más eficientes, precisos y acertados los procesos en construcción".
Con el proyecto Rebecca, Grant Thornton realizará una de las primeras aplicaciones mundiales de la inteligencia artificial a un contexto real de obra, lo que servirá para fortalecer el entorno tecnológico de sus servicios de BIM y project management.
BIM es un conjunto de técnicas, metodología y herramientas informáticas que tiene como objetivo preconstruir virtualmente los edificios e infraestructuras para evitar el despilfarro, que en términos BIM equivale a emplear más recursos materiales y económicos de los estrictamente necesarios, pero también a realizar construcciones poco sostenibles.
"BIM permitirá optimizar el diseño y realizar múltiples simulaciones que, junto con el empleo de materiales apropiados y técnicas constructivas concretas, producen viviendas e infraestructuras que consumen menos energía, son más confortables y más baratas de mantener. Además, el proceso de preconstrucción virtual con BIM nos permite adelantarnos a ciertos fallos e imprevistos de las obras, además de corregir fallos de diseño", explica Fernando Valero, socio de Construcción, Infraestructuras y Real Estate de Grant Thornton.