La pobreza se ha extendido de manera alarmante en Andalucía. Casi un 40 por ciento de su población está en riesgo de pobreza o exclusión social, lo que supone una cifra de tres millones de personas, según la oficina estadística comunitaria, Eurostat. La crisis está perjudicando claramente a los más pobres, mientras beneficia a los ricos. Más de 600.000 andaluces carecen ya de medios para vivir y 447.000 familias tienen a todos sus miembros en paro.
Uno de los colectivos más comprometido con los sectores menos favorecidos es la Federación de Bancos de Alimentos de Andalucía, que ha propuesto crear una Mesa Nacional de la Alimentación & Mesa Regional. El proyecto Mena&Mera, que se presentaría al Gobierno de la Nación y a otras administraciones, sería un compromiso entre instituciones públicas, el mundo empresarial y entidades sociales para encontrar la mejor forma de aprovechar todos los recursos que afectan a la alimentación humana que, en la actualidad, se despilfarran o se destruyen.
La Federación de Bancos de Alimentos de Andalucía propone abrir una mesa técnica de debate con los implicados más directos en la cuestión (producción, transformación y comercialización de alimentos), un nuevo diseño del IRPF y consenso entre los medios de comunicación, entre otras iniciativas.
En este proyecto no caben demoras pues la inquietud y otras circunstancias hacen que se lancen planteamientos locales o regionales sin la adecuada investigación y sin sopesar las consecuencias de lo que se vierte a una opinión pública que no está para bromas. Se piden calendarios ágiles, con controles sobre los avances que se produzcan y acuerdos concretos.
El presidente de la Federación de los Bancos de Alimentos de Andalucía, Javier Peña Vázquez, considera que las dificultades que hay que superar, aun siendo diversas y de distinta índole, se pueden abordar a corto y medio plazo y pueden producir una serie de resultados inmediatos. Apoyemos este proyecto sin ambages. Quizá sea de los pocos que merece la pena.