Andalucía cuenta con 945 kilómetros de costa de Pulpí a Ayamonte, con fachadas al Mediterráneo y al Atlántico. El mar aporta 300.000 puestos de trabajo y 17.000 millones de euros anuales a la riqueza de la comunidad. El 10% del PIB regional. Y aún no se aprovechan buena parte de los recursos que brinda. La Economía Azul es ya un pilar para Andalucía, pero aún ofrece un mar de oportunidades.
La Economía Azul se basa en el desarrollo de todas las actividades y sectores vinculados al mar y a los océanos. Energías renovables, acuicultura y la pesca, industria agroalimentaria, turismo marítimo, costero y de cruceros, minería, transporte y logística, biotecnología, la construcción naval … Algunas son actividades milenarias, otras novedosas. Pero la etiqueta de economía azul añade un sentido de sostenibilidad e innovación.
La Comisión Europea estima que hasta el año 2030 la Economía Azul crecerá al doble de velocidad en relación al ritmo del crecimiento económico general. Esto supone 10,8 millones de empleos en Europa y una facturación de 1 billón de euros.
Un exhaustivo informe elaborado por la Confederación de Empresarios de Andalucía, CEA, insiste que en "para Andalucía, la Economía Azul supone un compendio de oportunidades que, con la estrategia adecuada, colocarían a la comunidad en la posición de liderazgo del Crecimiento Azul de Europa".
Se han identificado cuatro áreas de actividad "prometedoras" a nivel de la Unión Europea: Acuicultura, Energía Renovable (eólica marina, oleaje y marea), Minería de los fondos marinos y Biotecnología Azul.
En la acuicultura andaluza trabajan ya 101 empresas (el 80% con menos de 10 trabajadores) con 158 autorizaciones de cultivo, una producción de 7.719 toneladas y un valor comercial 62,3 millones de euros.
Según el "Estudio del Sector de biotecnología en Andalucía para su Internacionalización 2017", publicado por Extenda y realizado por la empresa Fundamenta Consulting, se localizan, en materia de Biotecnología en Andalucía, un total de 212 empresas. Su implementación a producción más importante hasta el momento es la acuicultura. Pero hay además iniciativas en materia de cultivo de algas y microalgas, que desarrollan soluciones competitivas para diversos sectores: salud, alimentario, energético, cosmético, etcétera. Son empresas pioneras de un sector emergente que no ha hecho más que empezar su camino.
Para ayudar en el camino del I+D+i en estos ámbitos Andalucía dispone de instituciones y organismos que deben aportar conocimiento: Campus de Excelencia Internacional del Mar (CEI•Mar), Instituto Español de Oceanografía (IEO), Instituto de Ciencias Marinas de Andalucía (ICMAN), Centro Tecnológico de la Acuicultura (CTAQUA), Instituto Andaluz de Investigación y Formación Agraria, Pesquera, Alimentaria y de la Producción Ecológica (IFAPA): Centro "Agua del Pino" y "El Toruño", Instituto Hidrográfico de la Marina, Unión Internacional Conservación de la Naturaleza (UICN), Centro Andaluz de Ciencia y Tecnología Marinas (CACYTMAR), entre otras.
La Agencia Andaluza de la Energía ha realizado un estudio sobre "Energías Marinas. Recursos Energéticos", en el que se enfoca pormenorizadamente el potencial del litoral andaluz para obtener energía eléctrica con los diversos tipos de energías renovables.
La energía undimotriz presenta en Andalucía, según los estudios desarrollados por la Agencia Andaluza de la Energía en colaboración con la empresa EneOcean, un potencial total de aproximadamente 2.000 MW, con áreas costeras adecuadas para su desarrollo, entre ellas la costa de Cádiz y el levante almeriense.
El potencial para la generación de energía procedente de las corrientes marinas de la costa andaluza se centra fundamentalmente en la zona del Estrecho de Gibraltar. En este caso, uno de los recursos brutos mejores del mundo con un potencial superior a los 7.000 MW.
Además, los parques eólicos marinos permiten la instalación de grandes turbinas de alto rendimiento con un bajo impacto paisajístico.
Respecto a la Minería Submarina, los expertos razonan que la Faja Pirítica Ibérica, que se extiende desde el sur de Portugal por toda la zona Oeste de Andalucía, es el principal yacimiento metalogenético europeo de piritas y es explotado desde hace siglo. Se da la posibilidad de que la riqueza de esta franja sea extensible a los fondos marinos. Por otro lado, en el Golfo de Cádiz y Mar de Alborán se han localizado nódulos de ferromanganeso.
Según el informe sobre Economía Azul de la CEA, Andalucía dispone de 13 puertos, con más de 86.000 empleos, un tráfico de 162 millones de toneladas en cifras precovid (el 28,75% del total nacional, con un incremento del 37,08% en los últimos 10 años). Tiene empresas de construcción y equipamiento líderes a nivel internacional como Navantia San Fernando y Puerto Real (1.686 empleos directos y 11.829 empleos indirectos) y Dragados Offshore Instalaciones en Puertos Real y Algeciras, además de numerosos astilleros medianos y pequeños distribuidos por toda la región.
La pesca genera 20.790 empleos (6.945 de la actividad productora pesquera y 13.845 en actividades asociadas), con una producción de más de 48.000 toneladas - valor comercial 156 millones de euros (2018), y una industria de transformación pesquera con 55 empresa, 2.383 empleos y 50.000 toneladas de producción, con valor comercial 400 millones de euros.
El Turismo Azul aporta casi 18 millones de turistas (57,5% del total andaluz, gracias a 372 playas en 60 municipios). La comunidad dispone de 64 espacios náuticos recreativos , con 1.100 empleos directos, 358 empresas y 380.000 turistas al año. Los cruceros movían antes del Covid un millón de pasajeros.
Para dar un impulso a la Economía Azul, la Confederación de Empresarios de Andalucía constituyó el mayo pasado una comisión, cuya presidencia recayó en presidente del Cluster Marítimo Marino de Andalucía, Javier Noriega. Tendrá que explorar todo un mar de oportunidades.