La primera almazara 4.0 con diseño y tecnología creada por GEA desde su Centro de Excelencia en Aceite de Oliva de Úbeda (Jaén) funciona en el Alentejo portugués. El proyecto se ha construido por encargo de Agrícola Parral, y desde el inicio de la actual campaña aceitera ha sido presentado ya como caso de éxito de digitalización en el sector en eventos. Una gran instalación con capacidad para procesar 1.700 toneladas de aceituna al día, en la que se pueden controlar todos los procesos, como la molturación, batido, decantación o filtración gracias a unos paneles de control claros y sencillos, con acceso a toda la información en tiempo real, así como a datos históricos y de tendencias sobre procesos y maquinaria que llegan desde el campo, a pie de olivo, hasta los depósitos de almacenamiento. Todo integrado en un único sistema que permite una gestión de datos de alto nivel tras incluir información específica sobre variedad de aceitunas y sus datos de análisis de laboratorio. Además, el operario o maestro de almazara está informado en todo momento gracias a las notificaciones automáticas predefinidas.
Desde la multinacional alemana indican que esta planta, denominada Proyecto 'Terranovus', es la primera gran instalación automatizada con un sistema de control completo llevada a cabo por GEA. Entró en funcionamiento en la pasada campaña y en esta ha confirmado las expectativas. El Centro de Excelencia de Aceite de Oliva de Úbeda, junto con el Centro de Competencia de Automatización de la compañía en Madrid, "han aplicado tecnología punta que ha demostrado su eficacia en otras aplicaciones industriales, para dar un paso de gigante hacia la digitalización plena en la extracción de aceite de oliva".
Pedro Muñoz, director general de GEA Westfalia Separator Ibérica, destaca que esta apuesta por tecnología "inteligente, conectada, que maneja conceptos de la industria 4,0, es novedosa en el sector del aceite". La compañía ya ha montado otro proyecto también digitalizado en Portugal, y acaba de cerrar un acuerdo para otra instalación. "Fue uno de los temas de los que más se habló en septiembre durante la pasada Expoliva, y 2022 será el año en el que se pongan en marcha bastantes proyectos más", indica.
Muchas almazaras con los equipos aún por amortizar han planteado consultas para digitalizar sus procesos, que se podrán hacer o no integrales "dependiendo del punto de partida de cada cual". En lo que sí insiste Muñoz es en que acometer esta inversión resulta "altamente recomendable".
Francisco Plaza, responsable de Servicio de GEA para Aceite de Oliva, señala que se ha concebido una solución puntera e innovadora en el sector oleícola a nivel internacional. Durante el proceso de diseño se han tenido en cuenta la normativa y estándares vigentes en sector tales como ISA95, ISA88, ISA101, GDPR o NIST.
El proyecto 'Terranovus' ha sido un éxito, insiste la empresa, gracias a la aplicación de la experiencia del Centro de Competencia de Automatización de GEA en procesos de automatización industrial a un sector en el que apenas se había empleado esta tecnología anteriormente. "Convertir una almazara a los estándares de la industria 4.0 mediante la transformación digital aporta un gran valor al cliente. Hemos iniciado el camino para llegar a la automatización completa y la gestión integral de todo el proceso, desde el manejo del cultivo hasta que sale el producto final", señala Plaza.
El Centro de Excelencia en Aceite de Oliva de Úbeda ha trabajado en este proyecto junto al Centro de Competencia de Automatización de GEA en Madrid para crear una almazara totalmente conectada e inteligente capaz de aportar este valor extra de la información en tiempo real, filtrada e individualizada, que es capaz de conectar el campo con la almazara de forma proactiva. "Esto implica ventajas tanto en términos de producción y optimización de los equipos como en el propio proceso y en mantenimiento predictivo, valor añadido del producto y seguridad de la calidad", han explicado desde la compañía.
Cuatro líneas
GEA ha instalado en la innovadora almazara cuatro líneas, dos con capacidad para procesar 350 toneladas al día y otras dos que alcanzan las 500 toneladas de aceituna en primera extracción. A ello hay que sumar la capacidad para procesar hasta 850 toneladas diarias en segunda extracción.
En Terranovus ya están produciendo, con grandes resultados en la primera campaña, dos decanter CF6000, dos decanter CF7000, dos centrífugas VSE 70 01 y una centrífuga VSE 40 02 de GEA. Los decanters CF6000 de gran producción están equipados con el sistema Varipond S también conocido como Paring Tube, un sistema registrado y patentado por GEA que permite la regulación del decanter en funcionamiento, evitando así las paradas técnicas para el cambio de diafragmas y las pérdidas que ello conlleva. Las centrífugas VSE 70 01 presentan doble rodete, lo que reduce el calentamiento del aceite durante el proceso de extracción.
Desde Úbeda
El Centro de Excelencia de Aceite de Oliva de GEA, ubicado en Úbeda, es la referencia de la multinacional alemana para el negocio del aceite de oliva a nivel mundial. Emplazado en el corazón de la principal zona productora de aceite de oliva del planeta, acoge un equipo humano multidisciplinar especializado en el diseño, montaje, puesta en marcha y mantenimiento de líneas de extracción de aceite de oliva en los cinco continentes. Además, el equipo comercial gestiona las ventas y los proyectos de almazaras del grupo.
El Centro cuenta con un departamento propio de I+D, que está centrado actualmente en convertir la almazara a los estándares de la industria 4.0 mediante la transformación digital. GEA trabaja para traer el futuro al presente, ya que ha desarrollado con éxito en los últimos meses varios proyectos que han logrado la automatización completa y la gestión integral de todo el proceso, desde el manejo del cultivo hasta la salida del producto final.
La sede de Úbeda tiene el apoyo del Centro de Competencia de Automatización de GEA Iberia, ubicado en Madrid, con más de 100 ingenieros, en el que toda la experiencia de este tipo de tecnología, obtenida en otros sectores industriales, se implementa en plantas de aceite de oliva.
Además, el Centro acaba de reorganizar su estructura directiva, integrada por Pedro Muñoz como director general de GEA Westfalia Separator Ibérica, Francisco Plaza como responsable de Servicio de Aceite de Oliva y Juan Manuel Jariego que acaba de incorporarse como responsable de Ventas de Aceite de Oliva.
Juan Manuel Jariego indica que la apuesta de GEA es no ser sólo un fabricante de producto, sino convertirse en un proveedor global de soluciones tecnológicas.
Otra de las principales fortalezas de GEA es su servicio técnico y de reparaciones para almazaras, que centraliza su actividad internacional desde Úbeda. Cada vez son más los clientes, especialmente las grandes almazaras, que se acogen al programa de contratos de mantenimiento, ya que han comprobado cómo el mantenimiento preventivo a lo largo del año logra reducir considerablemente las averías en la maquinaria durante la campaña.