Es el principal reto de la industria de fondos. Educar al inversor para evitar que tome decisiones a corto plazo, movido por el devenir puntual del mercado. La formación, no sólo al cliente sino también a las redes comerciales, es la clave para conseguirlo.
Tuvieron un excelente 2009 gracias al rally que experimentaron tanto los mercados de renta variable como de renta fija, pero de repente la sostenibilidad del sistema financiero que tanto se había cuestionado en 2008, sobre todo después de la quiebra de Lehman, se trasladó a los gobiernos que en su día habían acudido al rescate de sus bancos. Y también a los que no, como es el caso de España.
Renovarse o morir
El negocio de las gestoras españolas ha sido uno en los que más se ha notado las dudas que despierta todo lo que huela a deuda de la eurozona. No en vano, más del 70% del patrimonio en fondos españoles está en productos monetarios y de renta fija a corto plazo. La guerra de depósitos que han llevado a cabo en muchos casos los bancos para los que trabajan tampoco ha ayudado al desarrollo de la gestión de fondos.
Foto de Elisa Senra.
Las gestoras han sufrido y se han visto obligadas a reducir sus costes, reestructurar su negocio y modificar su oferta de fondos. Convierten así en realidad el famoso refrán de renovarse o morir. Y en este contexto el partícipe debe saber qué proyectos han llevado a cabo y sobre todo cómo ven sus respectivos negocios de cara al futuro. Muchas fueron las respuestas que dieron los que participaron en el Observatorio organizado por elEconomista y Accenture bajo el título Nuevo mapa en la gestión de activos en España.
Uno de los puntos con los que los responsables de las gestoras que acudieron al encuentro coincidieron casi por unanimidad fue en el daño que estaba haciendo a la industria el fuerte peso que suponen los fondos conservadores y a corto plazo, como los productos monetarios y los de renta fija, a sus negocios. Sobre todo desde que la CNMV obligó, hace ahora un año, a que los activos que se incluyen dentro de los fondos monetarios se valoren a precio de mercado. Es decir, los inversores ven, en todo momento, la evolución negativa de su fondo, independientemente que a vencimiento sea muy difícil que un monetario pierda dinero.
El estrés de los monetarios
"Hay que hablar con el regulador porque hay activos que no tiene sentido que se valoren a precio de mercado", afirma Antonio Banda, director de inversiones de Bankinter. "En España tenemos el problema de que el cliente mira el valor liquidativo de los fondos todos los días y eso nos ha destrozado, genera mucho estrés y provoca que se tomen decisiones a corto plazo", asegura Dolores Ybarra, consejera delegada de Santander Asset Management.
Según explica Ángel Martínez-Aldama, director general de Inverco, el regulador español ya conoce las quejas de las gestoras. "La CNMV es consciente del problema y hay que modificarlo porque vemos a fondos monetarios cayendo un 25% en 2010, aunque a medio plazo el cliente no tiene por qué perder dinero", asegura.
Sin embargo, el principal reto de la industria sigue siendo el de concienciar al inversor sobre la importancia del ahorro a largo plazo. "En España no hay inversores, hay ahorradores y el 40% de ellos está en duraciones inferiores a los seis meses y lo comparan con los depósitos", asegura Ybarra. "No nos juzgan en el corto plazo, sino el día después", confirma Xavier Aspachs, subdirector de Bansabadell Inversión.
Son precisamente esos depósitos los mayores enemigos de la industria de fondos. Máxime en los últimos meses, cuando la guerra por captar pasivo se ha recrudecido. Una competencia que en algunas ocasiones se ha tachado de ilegal. Sobre todo si se tiene en cuenta que muchas de las entidades que entraron en esa guerra han sido luego intervenidas por el Banco de España o reciben financiación del Frob. Aun así, Martínez-Aldama cree que esta guerra no será un impedimento para que la industria vuelva reencontrarse con los momentos de gloria que vivió en el pasado. "A medio plazo volveremos a recuperar el patrimonio que teníamos en 2007, ya que la reforma de las pensiones va ayudar a ello".
No obstante, el primer paso para conseguirlo es la formación y no sólo la que recibe el cliente, sino también la que recibe la red comercial. Al fin y al cabo, como explica Xavier Aspachs, subdirector general de Bansabadell Inversión, "hay que hacer comprensibles los productos para la red porque no hay que olvidar que nuestro principal cliente es el comercial". Gonzalo Rodríguez-Sahagún, presidente de Gescooperativo, considera que la crisis ha venido muy bien desde este aspecto. "La gente percibe así cual es su nivel de riesgo. Sin embargo, creo que es difícil que los bancos dirijan a sus clientes a fondos mientras haya crisis de liquidez en el mercado".
Sin embargo, las gestoras no tiran la toalla y se preparan ya para el momento en que sus redes comerciales dejen de centrarse en la venta de depósitos para concentrarse en la colocación de fondos. Dos son los cambios que han llevado a cabo las gestoras: la racionalización de productos y la comercialización de fondos de terceros, lo que se conoce como arquitectura abierta. "En BBVA hemos apostado mucho por la gestión de activos. Estamos reforzando los equipos y queremos abrirnos a otros clientes y redes de distribución", afirma Paloma Piqueras, consejera delegada de BBVA Asset Management.
"Se está avanzando hacia una especialización del negocio ya que es muy difícil destacar por gestionar todos los productos bien así como entender que estar en una estrategia conservadora es una decisión de riesgo en sí misma", afirma Miguel Irisarri, director general de A&G Banca Privada.
La renovación del sector
Las gestoras se han dado cuenta con la crisis de que no se puede hacer todo y hacerlo todo bien y por ello han optado primero por fusionar buena parte de su gama de fondos y segundo, por gestionar sólo aquello que saben hacer. "En lo que no somos especialistas nos hemos retirado y hemos montado una plataforma de selección de fondos de terceros a través de due dilligence, pero ya hemos fusionado 100 fondos y no tenemos mucho más margen", afirma Dolores Ybarra.
Sí tienen margen en Bankinter. Antonio Banda asegura que están "en proceso de racionalización en el que se podrían eliminar el 75% de los fondos". Una solución que Martínez-Aldama considera muy lógica. Y da cifras que lo confirman. Mientras que en EEUU existen 8.000 fondos, en Europa hay 50.000 productos. "Hay una inflación en el número de fondos", afirma.
La duda está en qué productos mantener y en cuáles hay que eliminar de la gama de fondos. "Oigo cosas contradictorias como que es un mercado que busca simplicidad o que busca productos innovadores", afirma Diego López, socio de servicios financieros de Accenture. Y las firmas de inversión contestan a su duda. Por ejemplo, la consejera delegada de Santander considera que "no hay que reinventar los productos, sino volver a los fundamentales. Nos hemos retirado de gestionar renta variable americana". Sin embargo, Miguel Irisarri cree que el principal problema al que se enfrentan las gestoras nacionales es que el inversor español es excesivamente conservador. "Falta educación financiera en los clientes".
Y no sólo en lo que respecta a los fondos de inversión. También en lo referente a los planes de pensiones. Un negocio en el que tienen muchas esperanzas de futuro. Sobre todo una vez se eliminen las deducciones fiscales por la compra de vivienda. "El peso del sector privado en planes de pensiones es residual pero hay que tener en cuenta que el sistema público de pensiones no está en peligro por la crisis económica sino por la demográfica", afirma Aldama.
Además, la buena noticia para que el desarrollo de este tipo de productos pensados para la jubilación llegue a buen puerto, aparte del hecho de que a partir del año que viene serán los únicos productos que ofrezcan deducciones fiscales, es que no tienen competencia de las gestoras extranjeras. Sin embargo el problema "es que los planes de pensiones tienen poca gestión activa, cobran comisiones inútiles y tienen muchas limitaciones a la hora de la inversión", afirma el subdirector general de Bansabadell Inversión.