
La planta invasora, el nenúfar mexicano, se ha convertido en un inquilino habitual en el Río Guadiana a su paso por Badajoz, afectando a 38 kilómetros del río, incluyendo su paso por el término municipal de Badajoz y sus afluentes, el arroyo de la Cabrera y el río Gévora.
Para poner fin a esta plaga invasora se ha creado una Comisión de Seguimiento, y este martes 8 de abril, se ha producido la primera reunión presidida por el delegado del Gobierno en Extremadura, José Luis Quintana.
Este encuentro tiene lugar tras la reciente resolución favorable de la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental del Ministerio para la Transición Ecológica sobre la Declaración de Impacto Ambiental para acabar con esta planta exótica.
A esta reunión han asistido el alcalde de Badajoz, Ignacio Gragera; la consejera de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Sostenible, Mercedes Morán, y Samuel Moraleda, presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadiana.
El proyecto incluye la retirada de todas las manchas de nenúfar y la desinfección de los lodos acumulados a lo largo de los años, los cuales han facilitado la proliferación de esta especie en el tramo urbano. La previsión es que las obras pudieran estar finalizadas en 2029, con un presupuesto aproximado de 26 millones de euros, cofinanciado al 85% con fondos europeos.
Tal y como ya se anunció, la obra se dividirá en dos fases. La primera, costará 6,5 millones, de los que 4,5 irán destinados a la empresa Tragsa para acometer los trabajos iniciales, más 2 millones para la asistencia técnica. Paralelamente se licitarán los 20 millones de euros restantes para la siguiente fase.
En su intervención, Quintana ha reiterado la importancia de la colaboración entre administraciones para acometer proyectos de este calado para abordar un problema ambiental, donde es fundamental el diálogo y la colaboración entre instituciones como la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG), la Junta de Extremadura y el Ayuntamiento de Badajoz.