
El aceite de cocina usado está dejando de ser un residuo para tener otra vida útil y sostenible gracias a la economía circular. Su recogida está permitiendo que pueda ser tratado con el fin de elaborar combustibles renovables que se emplean en vehículos sin necesidad de hacer cambios en el motor.
Este es el objetivo de la iniciativa que ha empezado a poner en marcha Repsol a través de sus estaciones de servicio en Aragón. La compañía mutilenergética ha conformado una red de 70 puntos de recogida en la comunidad aragonesa de este aceite de cocina usado para realizar una gestión sostenible de este residuo doméstico que pasará a convertirse en la materia prima que, una vez tratada, se empleará para producir los combustibles renovables, además de facilitar que sus clientes puedan depositarlos de forma responsable.
De este modo, se avanzará en recoger el aceite de cocina usado doméstico en el que todavía hay unas bajas tasas de recuperación, dado que se generan alrededor de 180.000 toneladas de aceite usado cada año en España, pero solo se recolecta menos del 5%.
A través de estos puntos se espera recoger más de 10.000 litros de aceite de cocina usado doméstico al año. Con cada uno de estos litros, se podrá fabricar 0,9 litros de combustible renovado para ser utilizado en los vehículos actuales y sin necesidad de hacer cambios en el motor. Actualmente, Repsol cuenta en Aragón con 101 estaciones Diésel Nexa 100% renovable y la previsión de la compañía es finalizar 2025 con un total de 112.
El Diésel Nexa 100% renovable está producido a partir de residuos orgánicos y, con la tecnología actual, es posible reducir las emisiones netas de CO2 hasta en un 90% en comparación con el combustible de origen mineral al que sustituye por la menor intensidad de carbono del combustible renovable por su origen orgánico.
Este diésel cuenta con una formulación exclusiva que optimiza las prestaciones y alarga la vida del motor, además de estar diseñado para todos los motores diésel. Actualmente, Repsol suministra Diésel Nexa 100% renovable en más de 900 estaciones de servicio de las que 101 están en Aragón.
La gestión renovable de este aceite redundará así de forma positiva en el medioambiente y también los clientes de Repsol se podrán beneficiar. Todos aquellos usuarios de Waylet tendrán un descuento de 30 céntimos por litro de aceite cocina usado entregado para un próximo repostaje, recarga eléctrica o bien para la adquisición de otros productos en cualquiera de las estaciones de servicio de la compañía.
En el proyecto, además, se cuenta con la colaboración de Recikla, entidad aragonesa sin ánimo de lucro formada en su mayoría por personas con discapacidad, emplea a 30 profesionales, que se encargará de la recogida y gestión del aceite usado depositado en las estaciones de servicio de Repsol en la comunidad aragonesa. Esta entidad cuenta con la certificación bajo el esquema ISCC EU con el que se garantiza la trazabilidad y sostenibilidad del residuo.
También se suma a este proyecto el Grupo Zoilo Ríos con su estación de servicio Los Ibones, que está construida con criterios de eficiencia energética, sostenibilidad ambiental, accesibilidad universal y confort de trabajadores y en la que, además, se incorporan las nuevas energías e, incluso, está preparada para añadir otras como el hidrógeno.
Además, Grupo Zoilo Ríos ya venía colaborando con Recikla desde hace más de 10 años en la recogida de aceite usado que, ahora, con Repsol se utilizará para la producción de la combustible renovable. En este proyecto, Repsol también cuenta con la colaboración del Departamento de Medio Ambiente y Turismo del Gobierno de Aragón a través de un protocolo para el desarrollo de la economía circular en el territorio aragonés.
No obstante, Aragón no es la única autonomía en la que Repsol está llevando a cabo esta iniciativa de economía circular, que ya se ha puesto en marcha en Madrid, Galicia y Castilla-La Mancha, sumando más de 500 estaciones en toda España. El objetivo es alcanzar las 1.500 en el territorio nacional a finales de año.