
La nieve, uno de los fenómenos meteorológicos más fascinantes, no solo despierta la curiosidad de los esquiadores, sino también de quienes planean viajes o simplemente desean disfrutar de un paisaje blanco. Pero, ¿cómo podemos saber si nevará en nuestra ciudad? La clave está en calcular la cota de nieve.
Cómo se calcula la cota de nieve
La cota de nieve es la altitud mínima a la que es probable que se produzcan precipitaciones en forma de nieve. Determinarla requiere analizar varios factores, como la temperatura a diferentes niveles de la atmósfera, la presión, y la humedad. Según eltiempo.es, se utiliza una fórmula que toma en cuenta las temperaturas a 850 hPa (unos 1.500 metros de altitud) y 500 hPa (alrededor de 5.500 metros), sumadas a una corrección que considera la altura geopotencial.
La fórmula general es:COTA (m) = (100 x Temp-850 hPa) + (50 x Temp-500 hPa) + 2100 + (Altura 850 hPa – 1350)
Este cálculo nos da una estimación de la altitud donde la precipitación cambia de lluvia a nieve. Sin embargo, no garantiza nieve a nivel del suelo, ya que factores como la intensidad de la precipitación o las condiciones locales también influyen.
¿Frío + precipitación = nieve?
Aunque el frío es esencial, no basta por sí solo. En España, debido al clima moderado por el Atlántico y la corriente del Golfo, las nevadas intensas requieren una combinación especial de factores. Las masas de aire frío suelen llegar desde el noreste, trayendo temperaturas bajas, pero con poca humedad. Para que nieve a nivel del mar, se necesita una fuente de humedad adicional, como la que pueden aportar borrascas o frentes húmedos provenientes del Mediterráneo o el Cantábrico.
Las temperaturas ideales para la nieve oscilan entre los +2 °C y los -5 °C cerca del suelo, ya que permiten la formación de copos grandes y cohesivos. A temperaturas extremadamente bajas, como -20 °C, el aire contiene menos humedad, reduciendo la acumulación de nieve.
¿Dónde consultar?
La forma más confiable de prever nieve es consultar modelos meteorológicos numéricos y expertos locales. También es útil observar señales naturales y seguir las predicciones de sitios especializados, que incluyen información detallada sobre cotas y probabilidades de nieve.