Suceso inédito en Nápoles (sur de Italia). Un niño de 13 años ha sido apuñalado por otro menor -de 10 años- porque no le ha dejado jugar con el balón, según ha revelado la víctima. El ataque, al parecer, está siendo investigado por los Carabineros actualmente.
Los hechos
Todo ha comenzado cuando la víctima estaba jugando con sus amigos a la pelota. De un momento a otro, ha aparecido el otro niño, al que no conocía de absolutamente nada, y le ha pedido de malas formas que le diera el balón. Sin articular más palabras, y viendo que no hacía caso a su orden, ha pasado a la acción.
Rápidamente, ha sacado un cuchillo y se lo ha clavado en el muslo izquierdo para después escapar. Tras lo acontecido, los padres de los otros niños han socorrido al adolescente como han podido y han taponado la herida, para acompañarlo más tarde a su casa.
Investigación abierta
De allí, ha sido trasladado a Urgencias, donde el personal sanitario ha determinado que no se trata de una lesión grave y le han aplicado algunos puntos de sutura. Los Carabineros, alertados por el hospital, están investigando los hechos y tratando de identificar al agresor.
"El primer pensamiento es para el niño: espero que se encuentre bien. No quiero señalar, pero no puedo más que hacer una amarga constatación: creo que la ciudad está abandonada", ha reflejado Angelo Parisi, deán de los párrocos de Giugliano y Qualiano, en Nápoles, en declaraciones recogidas por la agencia de noticias Ansa.
A tener en cuenta
Ante este panorama, el Gobierno italiano ha ordenado intensificar la vigilancia, sobre todo nocturna, como parte de un "plan extraordinario" para afrontar el fenómeno de la violencia juvenil, después de que en las últimas semanas hayan asesinado a varios adolescentes. Sí, precisamente otros jóvenes de su edad.