Galicia
UFD, la distribuidora eléctrica de Naturgy, ha informado de que unos 23.000 gallegos se han visto afectados por los cortes en el suministro eléctrico provocados por la borrasca 'Kirk' en las últimas horas. Ante esta situación, señalan que han movilizado desde la tarde del martes a unas 500 personas, entre brigadas y operadores de red, para hacer frente a las incidencias causadas por el temporal.
También disponen de medio centenar de grupos electrógenos con el fin de agilizar la reposición del suministro eléctrico en los casos en que fueran necesarios. Según los datos de primera hora de la mañana, las incidencias afectaban a unos 23.000 clientes en Galicia. Por provincias: 11.700 en Pontevedra, 5.600 en Ourense, 5.200 en A Coruña, y 760 en Lugo.
Más concretamente, los municipios afectados son Tomiño, Oia, Vigo, Vilaboa, Moaña, Marín, A Estrada y Gondomar en Pontevedra, Entrimo, Cartelle, San Cristovo de Cea, Ribadavia, Nogueira de Ramuín, en Ourense y Neda en A Coruña. Con todo, matizan que los afectados suponen menos del 1% de todos sus clientes. Señalan también que la mayor parte de estas incidencias están ocasionadas por la caída de árboles, ramas y cortezas sobre las líneas por el fuerte viento.
El exhuracán 'Kirk', ya convertido en borrasca, dejó en Galicia un total de 1.322 incidencias, la mitad de ellas concentradas en la provincia de Pontevedra, fundamentalmente por carreteras cortadas, desprendimientos e inundaciones provocadas por los vientos de hasta 150 kilómetros por hora y las lluvias que, en algunos puntos, superaron los 90 litros por metro cuadrado.
La Axencia Galega de Emerxencias ha hecho balance de las últimas 24 horas en las que la entrada del ex huracán 'Kirk' causó un reguero de incidencias que obligó a desplegar a los servicios de emergencias por la práctica totalidad del territorio gallego. A pesar del elevado número de incidencias, no hubo que lamentar personas heridas en el primer gran temporal de la temporada en Galicia.
Entre el martes y las 19:00 horas de este miércoles, la central del 112 atendió más de 1.300 incidencias, 732 de ellas en la provincia de Pontevedra, donde se encuentra el municipio más afectado por la borrasca, Vigo. En la ciudad olívica se produjeron 157 intervenciones contabilizadas por la central autonómica de emergencias para retirar árboles caídos sobre coches o vías de comunicación y garantizar la seguridad de puntos afectados por destrozos provocados por los vientos que mantuvieron en aviso rojo a todo el litoral de Pontevedra durante las horas centrales del día.
Santiago y A Coruña
El segundo municipio más afectado ha sido Santiago, con 67 incidencias, entre las que ha destacado el desprendimiento de la cubierta del conservatorio de música o la caída de parte del tejado de un edificio situado en la rúa do Preguntoiro, así como la caída de varios árboles en la Alameda.
A Coruña fue la segunda provincia con mayor número de incidencias con 329, seguida por Lugo con 118 y Ourense con 134. La ciudad de Pontevedra (59), A Estrada (53) o Nigrán (37) fueron, tras Vigo y Santiago, los municipios que requirieron de más intervenciones de emergencia vinculadas al paso de 'Kirk'.
Más de la mitad de los problemas causados por el temporal han sido la caída de árboles y ramas en carreteras (791), seguido también por cables y postes de luz o teléfono derrumbados (166). También se dieron 133 actuaciones para prevenir posibles riesgos.
Las lluvias torrenciales que dejó 'Kirk' a su paso, que alcanzaron los 90 litros por metro cuadrado en Rois (A Coruña) o Forcarei (Pontevedra), provocaron el desborde de ríos en distintos puntos de la geografía gallega, como Padrón (A Coruña), Ponte Caldelas (Pontevedra) o Abadín (Lugo), entre otros.
Además, también provocó el desborde de una presa en Aranga (A Coruña) que inundó las inmediaciones. Pese a finalizar el período de paso de la borrasca por Galicia y levantarse todas las alertas en el interior, el 112 apela a continuar con las precauciones, especialmente en la costa, que continúa en aviso naranja.
Asimismo, un total de siete ríos permanecen en vigilancia por su elevado caudal. Se trata del Dubra, el Mandeo y el Mendo en la provincia de A Coruña, el Tea y el Lérez en Pontevedra, y el Ladra y el Ouro en Lugo.
