
El distrito de Gorakhpur, en el norte de India, ha sido testigo de una historia inaudita: la de una mujer que, tras ser identificada como fallecida e incinerada, ha sido descubierta días después viva y a cientos de kilómetros. Una historia en la que nada es lo que parece.
Según informa Press Trust of India, Ram Sumer denunció la desaparición de su mujer Phoolmati y recibió cuatro días después la noticia que no deseaba oír: se había encontrado un cuerpo que respondía a la descripción que había dado de ella. El hombre reconoció el cadáver de su esposa y organizó todos los ritos funerarios, incluida la incineración.
La autopsia realizada al cuerpo de la mujer reveló que había sido estrangulada, por lo que las autoridades abrieron una investigación en la que se dispuso a geolocalizar el teléfono de la mujer...y las fuerzas del orden se llevaron una sorpresa: el teléfono estaba encendido a 600 kilómetros de distancia, en la ciudad de Jhansi.
La policía logró localizar a uno de los contactos con los que Phoolmati había mantenido más llamadas y fue él la persona que les conectó con la mujer, que seguía sorprendentemente viva y le había pedido expresamente llevarla hasta allí. Sin embargo, las autoridades indias se desplazaron hasta la zona y llevaron de vuelta a Phoolmati con su marido.
En estos momentos, las autoridades investigan cuál es la relación entre los implicados, la identidad de la mujer incinerada y por qué el marido de Phoomati identificó a una persona como su mujer cuando no era tal. Toda una historia de misterio sin resolver.