
El Rey Felipe VI ha entregado este viernes, 14 de junio, el Premio Carlos V al expresidente del Banco Central Europeo y del Consejo de Ministros de la República de Italia, Mario Draghi, en una ceremonia que se ha celebrado en el Monasterio de San Jerónimo de Yuste, en Cuacos de Yuste (Cáceres).
Felipe VI ha definido al expresidente del Banco Central Europeo y del Consejo de Ministros de la República de Italia, Mario Draghi, como "un artesano de obras y tejedor de consensos", así como "un europeo europeísta y un europeísta europeo".
Un hombre que desde la Presidencia del Banco Central Europeo "supo afrontar, con enorme valentía, una de las mayores crisis que ha vivido la Unión, poniendo en marcha una serie de medidas contundentes y sin precedentes que lograron, en plena recesión, mantener la fortaleza del euro y la autonomía del Banco Central Europeo", ha añadido el monarca en su discurso.
De nuevo sobre el galardonado, Felipe VI ha señalado que el jurado del Premio Carlos V ha destacado "la manera ejemplar con la que ha promovido los principios éticos europeos como ejes centrales de la gobernanza económica", destacando "su extraordinaria capacidad, previsión y diálogo al servicio de una Europa unida", así como "su atención por la juventud como garante del futuro de Europa".
El Rey Felipe VI defendió que ante los momentos "decisivos" actuales en los que se está "definiendo" el mundo y la Europa futura hay que aplicar "valentía, solidaridad y compromiso" para afrontar los "grandes desafíos", entre ellos una legislatura que "puede transformar el club comunitario, que va a suponer una reformulación de estrategias" en la UE.
Así, tras apuntar que el mapa geopolítico "está cambiando", ha considerado que "Europa debe recuperar la competitividad, buscar una posición preeminente en el tablero geopolítico y geoeconómico internacional"; y en este marco ha defendido que, toda vez que "el alma de Europa son sus ciudadanos", todas las políticas "tienen que situarlos en el centro de su acción".
Con ello, Felipe VI ha señalado que la "voz" de Europa debe "oírse" y también sus valores, como la dignidad humana, la libertad, la democracia, la igualdad, el estado de derecho, el respeto a los derechos humanos, el pluralismo, la no discriminación, la tolerancia, la justicia, la solidaridad y la igualdad entre hombres y mujeres.
"Sabemos que la defensa de la democracia comienza con la participación de los ciudadanos", ha afirmado también el Rey, quien ha añadido que tras las recientes elecciones europeas va a comenzar la 10ª legislatura, periodo en el que "habrá que hacer frente a desafíos muy grandes, tanto internos, como externos; una legislatura que pueda transformar el club comunitario, que va a suponer una reformulación de estrategias".
Asimismo, durante su discurso Felipe VI ha valorado el "carácter especial" de Extremadura como "tierra abierta, solidaria, orgullosa de su pasado y comprometida con el futuro que está construyendo".
Lo ha señalado al hacer referencia a la entrega en Cuacos de Yuste (Cáceres) de los Premios Carlos V, un "gran rey emperador que tanto vivió y sintió una Europa, como también su proyección Atlántica y al mundo".
"Por ello nos alegra regresar una vez más a esta querida tierra extremeña que lo alojó en sus últimos días, que ha sabido asumir y aunar esa identidad europea y vocación iberoamericana; conjunción que le imprime un carácter especial de tierra abierta, solidaria, orgullosa de su pasado y comprometida con el futuro que está construyendo", ha afirmado sobre Extremadura.
El expresidente del Banco Central Europeo y del Gobierno de Italia Mario Draghi en su discurso ha considerado que la Unión Europea se enfrenta a decisiones "urgentes" que requieren un "grado de cooperación y coordinación" entre sus estados miembros "no visto hasta ahora" para afrontar los cambios que amenazan su modelo social.
Así, confía en que los europeos tengan la "determinación, la responsabilidad y la solidaridad" de dar este paso que ahora parece "abrumador" si quieren "defender" su empleo, su clima, sus valores de equidad social y de inclusión, y también su independencia.
En un discurso en inglés y tras la proyección de un "emotivo" vídeo sobre su trayectoria, Dragui ha defendido la necesidad de aumentar la productividad como principal vía para "crecer más rápido y mejor" para poder afrontar los cambios de paradigma a los que se enfrenta Europa, además de un rediseño de su política industrial, que requiere una reducción de los costes de la energía, o la imposición de aranceles en el marco de una política de comercio que "reduzca las dependencias geopolíticas de países en los que ya no podemos confiar".
Todo ello, ha remarcado, manteniendo unos niveles altos de protección y redistribución que no son "negociables". "La lucha contra la exclusión social será la base, no solo para conservar los valores de equidad social de la Unión, sino también para que el camino para crear una sociedad más tecnológica tenga éxito".
Por su parte, la presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, ha asegurado que Europa es "esperanza" de paz, de convivencia, de unión, de justicia, de solidaridad y de lealtad y que "nadie debe cuestionar sus cimientos" ni "dar la espalda a su cultura".
"Nadie debe quitarnos este brillo en la mirada, este proyecto compartido, esta institución entre instituciones. Nadie debe cuestionar sus cimientos ni dar la espalda a nuestra cultura, porque Europa es un faro sin el que nuestros valores se hundirían sin remedio, destrozados por las rocas, víctimas del furioso oleaje de nuestros tiempos", ha sostenido.
Así, Guardiola ha dado la enhorabuena a Draghi, quien recibe este reconocimiento, ha dicho, por su labor por "esta tierra común", que es Europa, así como "por su audacia, por su rigor, por su coraje, en momentos muy delicados para la Unión".