
Conseguir animales más robustos y con más capacidad de adaptación mediante la selección genética es uno de los principales objetivos de Pastorclim, un proyecto en el que se analizarán los retos a los que se enfrenta el pastoreo extensivo en el Pirineo por el aumento de las temperaturas.
La tradicional imagen del ganado pastando por campos o montañas acompañados de un pastor y de los habituales y necesarios perros puede dejar de ser una realidad tal y como se conoce hoy en día, a pesar de todo el impacto positivo que tiene en los ecosistemas.
El cambio climático no solo introduce modificaciones en el clima, por ejemplo en las variaciones de temperatura, o en el suelo. Su impacto también afecta a la ganadería y, especialmente, a temas clave como el pastoreo y la alimentación de la cabaña ganadera mediante las hierbas que crecen de forma natural por los caminos que atraviesan o la presencia de agua en los caminos.
El estudio de estos efectos es justo lo que se está analizando dentro del proyecto Pastorclim, liderado desde el campus oscense de la Universidad de Zaragoza y que cuenta con la participación y colaboración de socios y entidades europeas. El objetivo es "ver cómo afecta el cambio climático al pastoreo. Los ganaderos y asociaciones ganaderas están preocupados por cómo impacta tanto a sus respectivas zonas como a sus razas ganaderas", explica Pilar Santolaria, catedrática de Producción Animal de la Universidad de Zaragoza y coordinadora del proyecto Pastorclim.
Con esta finalidad se va a trabajar durante los próximos tres años (hasta el 1 de marzo de 2027) con diferentes razas autóctonas ganaderas. Son la gascona de los Pirineos, bruna d'Andorra, bruna dels Pirineus, pirenaica y ovinas pirenaicas de España, Andorra y Francia, zonas geográficas que forman parte de este estudio. En total, se analizarán 8.280 cabezas de ganado vacuno y 3.000 de ovino.

"Todas ellas comparten un sistema de producción parecido. Los animales suben a puerto en verano, es decir, pastorean a grandes alturas en verano y, en otoño, primavera e invierno van bajando hacia el valle. Hacen como una trashumancia corta o trasterminancia entre valle y puerto", añade Santolaria, quien incide en que los ganaderos están preocupados por ver cómo puede afectar el cambio climático a este manejo tradicional ante una primavera que cada vez llega antes, una menor calidad de los pastos y la escasez de agua.
En esta línea, Pastorclim va a poner el foco en la genética de cada una de las razas ganaderas de este estudio con el fin de su mejora. En concreto, se va a "genotipar a los animales para buscar los genes asociados a una mayor resiliencia, rusticidad, a una mayor capacidad de pastoreo. Vamos a ir a una mejora genética de animales más adaptados al cambio climático, pero buscando el genotipado para seleccionar a los más aptos".
Esta selección supone dar pasos más allá de la labor que se ha venido haciendo en otras investigaciones como, por ejemplo, las realizadas en España, país en el que es obligatorio por normativa que cada raza tenga su programa de mejora genética. "Hasta ahora se ha buscado sobre todo el rendimiento cárnico, pero vamos a introducir otros índices como la longevidad, la robusticidad, la capacidad de adaptación de los animales. Es buscar nuevos índices o criterios de selección, teniendo en cuenta esa parte medioambiental" por el cambio climático.
De este modo, se hará una selección en la que se valorarán más los marcadores genéticos en lugar de fijarse más en los aspectos visuales del animal, acercando además el genotipado a los ganaderos y asociaciones sectoriales a las que les resultaba difícil el acceso a esta tecnología por su coste económico. "Con este proyecto, vamos dar impulso a esa mejora genética molecular. Es a futuro, iremos poco a poco porque se van a quedar los animales que mejor responden al extensivo. Es dirigir la raza a este tipo de animales", incide la investigadora.
Análisis del comportamiento animal
Además de la genética, el proyecto también va a trabajar en Aragón y en Francia con collares virtuales para estudiar los movimientos de la ganadería de alta montaña. Con este sistema, aparte de limitar las zonas en las que el ganado se mueva, cada animal va a estar geolocalizado.
Esto permitirá visualizar su movilidad en puerto para saber cómo se comportan, por ejemplo, los días de mucho calor, qué hacen, hacia dónde van y conocer cuánto tiempo pueden estar sin beber agua ante la escasez de este recurso o las áreas a las que se desplazan para beber.
La utilización de collares virtuales es novedosa en estas zonas y ganaderías. "Están muy interesados. Es una tecnología que les viene muy bien y tienen ganas de tenerla", aunque de momento no les resulta asequible, dando con Pastorclim los primeros pasos.
Formación y divulgación
Pastorclim también tiene otros ejes de acción como el estudio de la calidad de suelos pastoreados y no pastoreados en alta montaña con el fin de poner en valor los beneficios asociados al pastoreo desde el punto de vista económico, social y cultural. Igualmente, se prestará especial atención al medioambiente de cara a la importancia del pastoreo para el desbroce, mantenimiento del paisaje o prevención de incendios, entre otros efectos positivos para la conservación de ecosistemas naturales.
Es una información que se dará a conocer a través de ferias ganaderas de Aragón, Cataluña y Andorra, zona está última que, además, es un modelo de impacto turístico del pastoreo al comercializar la carne en circuitos cortos y restaurantes para dar valor medioambiental.
Precisamente, para saber la percepción del consumidor sobre este tipo de carne procedente de animales que han pastoreado, se llevará a cabo dentro de Pastorclim un estudio para ver cómo valorarían este producto. Y, dentro del proyecto, aún hay otro eje más: la formación. "Hay socios de escuelas de pastores o de capacitación agraria. Vamos a buscar módulos de formación para que no se pierda el saber hacer del pastoreo" y mantener vivo este manejo tradicional, concluye Pilar Santolaria.
De este modo, se pretende facilitar la transmisión de conocimientos relacionados con la actividad pastoral entre generaciones y territorios pirenaicos. Todos unos ejes de acción que posibilitarán la caracterización y puesta en valor de los servicios ecosistémicos, culturales y turísticos relacionados con la trashumancia y el pastoreo.
Pastorclim es un proyecto POCTEFA. Está financiado al 65% por la Unión Europea a través del programa Interreg VI-A España-Francia-Andorra (POCTEFA 2021-2027). La financiación total es de 1,8 millones de euros.
Además de la Universidad de Zaragoza, también participan: CITA, UAB, Asociación Aragonesa de Ganaderos de Bovinos de Raza Pirenaica (ASAPI), Federació Raça Bruna dels Pirineus (Februpi), Gobierno de Andorra, Ramaders, Gascon/UPRA Ovines PC, EPL St-G, CFPPA 09 y CDA09