El delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, ha indicado que el Ejecutivo trabaja con la operadora ferroviaria Renfe y el administrador de infraestructuras Adif para dar "solución inmediata" a los viajeros afectados ante los "reiterados" retrasos de trenes registrados en Galicia en los últimos días.
Blanco ha dicho que el Gobierno está "absolutamente implicado" con los usuarios y en comunicación constante con ellos. Según él, el hecho de que a medio plazo se pueda solucionar esta situación no significa que no se busque una "solución inmediata" para los viajeros.
Por ello, ha querido enviar un mensaje de que se está trabajando para que todos los gallegos que cada mañana utilizan el tren puedan hacerlo sin retrasos, con el objetivo de que no se repitan situaciones como las vividas este lunes y que se den soluciones alternativas a los viajeros.
Averías que se están produciendo desde hace tiempo y están afectando a los usuarios que cada día necesitan coger el tren. Precisamente hoy varias incidencias técnicas registradas en los trenes que unen Vigo y A Coruña provocaron nuevos retrasos a primera hora de la mañana afectando a centenares de viajeros.
El ferrocarril que tenía que salir de Vigo a primera hora acumuló más de una hora de demora porque hubo que apartar otro que estaba aparcado en la vía. Y el que venía de A Coruña no traía plazas suficientes y se fletaron buses para paliar el fallo.
Imprevistos
Al respecto, Blanco ha recordado que se tratan de averías que no se pueden prever, pero sí se pueden dar soluciones alternativas para que no haya perjuicio para los viajeros.
Toda esta situación que es reincidente provocó enfados entre los usuarios afectados. En concreto, los ferrocarriles de las primeras horas entre Vigo y A Coruña, suelen ser las frecuencias más demandas porque llevan a cientos de personas a sus puestos de trabajo.
Esta situación obligó a Renfe a fletar autobuses para cubrir algunos tramos. El tren que debía salir de Vigo a las 6.40 horas no lo hizo. Según la aplicación de Renfe, arrancó con 65 minutos de retraso, más de una hora de demora.
También hubo problemas en el trayecto sentido contrario. A lo largo de la mañana la situación se fue aliviando pero aún no está normalizada. De hecho, los trenes del eje atlántico siguen circulando con retrasos de más de diez minutos.