
La empresa semipública Defex queda libre de todo cargo, pero su exdirector comercial, Manuel Iglesias-Sarriá, no ha corrido la misma suerte. La Sala de Apelación de la Audiencia Nacional ha sido firme con su resolución. Iglesias-Sarriá tendrá que ir a prisión y cumplir la pena de dos años.
La pena ha sido mínima en comparación con la petición del Ministerio Fiscal. Este pedía seis años por malversación de caudales públicos y casi otros dos años por falsedad documental.
Además, el presidente de la subcontratista de Aresa, Óscar López i Salvadó, seguirá los pasos de Iglesias-Sarriá y tendrá que cumplir la misma pena de cárcel, según ha confirmado la Sala de Apelación. Aresa también ha sido condenada por delito de corrupción en las transacciones comerciales internacionales al pago de una multa de dos años con una cuota diaria de 30 euros. Todo lo contrario ocurrió con, Deimos Space y su director comercial que fueron absueltos de todos los delitos.
Otros frentes
El pasado febrero, la Audiencia Nacional ya exculpó a Defex por las adjudicaciones en Camerún entre el 2005 y 2013, cuando la empresa suministró bienes de defensa y seguridad para el país. La acusación consideraba que la empresa recibía estas adjudicaciones a cambio de comisiones y sobornos a las autoridades y funcionarios. Pero, la Audiencia fue clara y aseguró que los hechos por los que se le acusaban finalizaron en 2014, antes de la entrada en vigor de la reforma que introdujo la extensión del régimen de responsabilidad penal a las sociedades mercantiles estatales.
La empresa de armamento, sin embargo, tiene varios frentes abierto y está siendo investigada por adjudicaciones irregulares en países como Angola o Arabia Saudí.