
Día 5 de septiembre, a las 11.00 horas, en la Plaza del Triunfo en Córdoba. Será cuando comience la concentración de agricultores y ganaderos ante la celebración en esta ciudad de la reunión de ministros de Agricultura de la Unión Europea en el marco de la presidencia española.
Convocados por ASAJA, COAG, UPA y Cooperativas Agroalimentarias, los agricultores aragoneses acudirán a esta concentración con el fin de exigir cambios en la política agraria europea. Una modificación que, para el sector, debe garantizar el sistema alimentario y un modelo profesionalizado de agricultura.
Desde el sector señalan que viven una situación de indefensión y la amenaza de las políticas de la Unión Europea, así como la creciente competencia desleal de terceros países.
Esto se acrecienta, además, por el encarecimiento de los costes de producción -subida del 35% en 2022-, la sequía y en consecuencia la caída de la productividad, la falta de rentabilidad de las explotaciones y los precios en origen que no garantizan la cobertura de los costes de producción.
En este contexto, los agricultores volverán a la calle para exigir soluciones y políticas coherentes en materia de cambio climático, seguridad alimentaria y protección de tejido productivo nacional y europeo.
El objetivo es así reclamar unas nuevas reglas del juego en las que la alimentación, garantizada desde nuestro sistema productivo español y construido sobre la seguridad y calidad, sea una cuestión de máxima prioridad para la Unión Europea.
Estas reivindicaciones se espera que lleguen a los ministros de Agricultura de la Unión Europea, así como al Comisario de Agricultura y Desarrollo Rural, Janusz Wojciechowski, al igual que otras que se lanzarán en esta concentración en la que también se pedirá un trato igualitario para las producciones europeas y las de terceros países.
En este sentido, los agricultores señalan que es fundamental intensificar los controles en frontera para garantizar la entrada de alimentos producidos bajo las mismas exigencias fitosanitarias, laborales y de calidad a las que están obligados los productores europeos.
La concentración servirá para denunciar los acuerdos de libre comercio de la UE, caso del Mercosur, que utilizan de forma sistemática al sector agrario como moneda de cambio, lo que deriva en el cierre a miles de explotaciones agrícolas y ganaderas de toda Europa.
En las reivindicaciones de las organizaciones agrarias también figura la última reforma de la PAC, aprobada pro Bruselas, que exige más con menos recursos. En este sentido, apuntan que estrategias como la "De la granja a la mesa" o la Ley de Restauración de la Naturaleza sobre las que señalan que se quedan en meras políticas de escaparate verde si no cuentan con una hoja de ruta realista y medidas de apoyo mucho más ambiciosas para que los agricultores profesionales puedan acometer la transición de manera justa, equilibrada y rentable.