Madrid
El Ensanche de Barcelona ha incorporado recientemente unos nuevos 'ejes verdes', que consisten en peatonalizaciones impulsadas por el Ayuntamiento para mejorar la calidad del aire en la ciudad. Sin embargo, ahora se desatan nuevos temores con respecto al ruido (sobre todo nocturno) de las terrazas, las cuales proliferan gracias a un espacio para vehículos reducido.
El vocal de urbanismo de la Asociación de Vecinos y Vecinas del barrio La Izquierda del Ensanche, Xavier Riu, habla de un mayor alboroto en sus calles hasta bien avanzada la madrugada: "Los vecinos y las vecinas estamos satisfechos con la pacificación de las calles, pero no queremos que se sustituyan los coches por más terrazas".
Placas en el pavimento
La medida del Ayuntamiento de Barcelona para evitar estas molestias es utilizar unas marcas en el pavimento, de modo que se restrinja la extensión de las terrazas. Las autoridades también han indicado que dichas plazas son igualmente útiles para ordenar os cambios en el urbanismo de la ciudad, tras las finalización de las obras.
El pasado miércoles, operarios municipales situaban estas placas delimitadoras en la nueva plaza entre las Calles Girona y Consell de Cent. La zona ha sido escogida precisamente por las constantes quejas de vecinos, por la 'difícil' convivencia que está marcando el inicio de este verano. En total, se planea la instalación de marcadores en hasta 155 terrazas, las cuales se ubican en los ejes recién urbanizados en Girona, Consell de Cent, Borrell y Rocafort.
Y es que el Ensanche de Barcelona se caracteriza por varias zonas con tensión, causadas por el ruido de unas terrazas que no paran de crecer. Y los vecinos avisan de que no solo las temporadas turísticas agravan la situación, sino también los cambios urbanísticos como las ya mencionadas peatonalizaciones.
El apoyo de la Guardia Urbana
El Ayuntamiento hacía público que se destina una nueva patrulla nocturna de la Guardia Urbana, desde el pasado fin de semana, para garantizar que se cumplen normas de convivencia en la zona. Se vigilará especialmente el respeto al descanso a los vecinos, a partir del cierre de las terrazas de restauración en las calles de Enric Granados y en Consell de Cent.
A pesar de todo esto, Riu añadía que faltan por retirar numerosas terrazas provisionales que el consistorio asignó a locales de la hostelería, para facilitar el acatamiento de las medidas sanitarias durante la pandemia. Varias de ellas dejaron de cumplir con la normativa legal en abril. Pero el Ayuntamiento ha respondido que dichas ampliaciones no se han mantenido en las zonas más saturadas. También hablan de una próxima campaña de inspección en las áreas en esos puntos.
