
El entorno actual de inflación y el aumento de los tipos de interés están introduciendo cambios a la hora de sopesar invertir y los productos en los que depositar, al menos, una parte del patrocinio. Sobre la situación actual, Pilar Barcelona, delegada Territorial del Comité de Servicios a Asociados de EFPA España en Aragón, habla con elEconomista tras la jornada celebrada en Zaragoza sobre asesoramiento financiero.
¿Es momento de invertir en el entorno actual de inflación e incremento de tipos de interés?
Por supuesto que es momento, más aun yo diría que es una necesidad, ya que con el nivel actual de inflación la pérdida de poder adquisitivo está asegurada y es mucho mayor que en épocas anteriores. De hecho, tras la fuerte subida de los tipos de interés que se ha producido durante 2022 y 2023 han surgido oportunidades, especialmente para el cliente conservador, que le permiten amortiguar esa pérdida de poder adquisitivo. Para batir la inflación será necesario incurrir en mayor riesgo, invirtiendo en bolsa u otros activos de riesgo al menos una parte del patrimonio. Y eso ya depende del perfil de riesgo que tenga cada cliente.
¿Cómo van a marcar los tipos de interés la inversión en 2023?
La inflación y por consiguiente los tipos de interés están siendo los indicadores de referencia de este cambio de ciclo. Mientras siga habiendo expectativas de subida de ambas, la renta fija a largo plazo puede seguir sufriendo, aunque en menor medida, ya que el alza de tipos esperamos que no sea tan pronunciada y los cupones más altos de los bonos van a ir compensando esas posibles minusvalías.
¿Y la renta variable?
También se ve perjudicada en un entorno de subida de tipos, que sin duda, afectará al crecimiento y los beneficios de las compañías, pero no tiene por qué afectar a todas las empresas ni sectores por igual, y ahí puede estar la clave. En este entorno siempre surgen oportunidades.
¿Cree que las entidades financieras empezarán a pagar todas por los depósitos?
Muchas entidades están empezando a ofrecer tímidamente depósitos, aunque es con carácter más defensivo que por convencimiento y de una manera discrecional. De momento, y a pesar de las medidas más restrictivas de los bancos centrales, sigue existiendo mucha liquidez el sistema y los bancos no tienen una necesidad perentoria de remunerar los depósitos. Una vez digerida la política ultra expansiva de la que venimos lo normal sería remunerar la liquidez, de una manera u otra.
¿Volverá con fuerza el plazo fijo?
Nunca se puede descartar pero lo cierto es que debería ir acompañado de un fuerte incremento en el crédito y no parece por el momento que vayamos en esa dirección.
¿Qué productos podrían ser los más rentables para el inversor?
Estamos viendo un mayor interés por la renta fija en todas sus versiones. Por un lado, la renta fija directa, especialmente deuda pública y más concretamente Letras del Tesoro, y por otro a través de vehículos como los fondos Monetarios y de Renta Fija más conservadores, en general los que invierten más a corto plazo. También ha levantado mucho interés los llamados fondos de rentabilidad objetivo, o fondos que intentan obtener una rentabilidad concreta a una fecha determinada.
Los productos más rentables siempre van asociados a asumir un mayor riesgo, y no todo inversor tiene un perfil tolerante. La renta variable suele ofrecer una mayor rentabilidad esperada siempre partiendo de la base de tener un horizonte de inversión a largo plazo. En cualquier caso no se puede generalizar porque toda inversión va asociada al perfil de riesgo de cada cliente. A la hora de tomar cualquier decisión de inversión es fundamental contar con un buen asesoramiento financiero, profesional y que le ofrezca confianza.
¿Se valoran cada vez más los elementos o el concepto ESG en la inversión?
Por normativa es obligatorio tener en cuenta las preferencias ESG de los clientes a través del Test de idoneidad. El interés del inversor se va incrementando poco a poco, aunque todavía hay una buena parte que creen que la sostenibilidad está reñida con la rentabilidad.
¿Cómo es el inversor aragonés?
El inversor aragonés es más conservador que la media nacional. Esta es la conclusión que se deriva de la radiografía que EFPA ha hecho del asesoramiento financiero en Aragón.
¿En qué está interesado el aragonés en invertir?
En los últimos meses el aragonés ha adoptado un perfil más conservador con la finalidad de preservar el capital. Las fuertes correcciones que se produjeron en 2022 han tenido buena culpa de ello.
¿Se observan diferencias con otras autonomías?
La diferencia fundamental es ese carácter conservador que tiene el aragonés y que muestra una cierta preferencia por los depósitos, cuentas remuneradas, la renta fija y activos inmobiliarios. También es curioso que en los últimos años muestra una mayor preocupación por la jubilación, aunque ello no se traduce en toma de decisiones de inversión con ese fin.
¿Es Aragón una comunidad inversora?
Si es inversora, pero con esos matices que hemos comentado en cuanto a preferencias por activos más conservadores.