
Un año después del colapso en la autovía A-6 a su paso por el núcleo de O Castro, Pedrafita (Lugo) en dirección hacia la provincia de León, la Xunta insta, de nuevo, al Gobierno central a que acceda a la reconstrucción sincrónica de ambos lados de la autovía ya que se pone en riesgo la seguridad de miles de usuarios y causa además, prejuicios en términos de logística y competitividad tal y como han manifestado afectados del sector del transporte por carretera.
La conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, se ha trasladado hasta este punto negro de la antigua N-VI, en el núcleo de O Castro (Lugo) con representantes del sector del transporte de mercancías para denunciar la situación de la autovía.
En el encuentro han participado los presidentes de Fegatramer y Tradime, Ramón Alonso y José Fernández, respectivamente; la presidenta de Acotrades A Coruña, Lucía Loureiro; el presidente de la Asociación do Transporte do Carbón das Pontes, Manuel Bouza Bouza; y el secretario de Tradime, Jesús Antonio Suárez.
La Xunta subraya que pidió por carta de nuevo al Ministerio de Transportes que cambie su posicionamiento y acceda a la ejecución como emergencia y de forma simultánea de ambos viaductos, para que la comunidad vea restituido el tráfico completo lo antes posible.
La negativa del Gobierno de España a rectificar su plan de reconstrucción está causando enormes perjuicios en términos de logística, de competitividad, afirman, y poniendo en riesgo la seguridad vial de miles de usuarios que cada día tienen que emplear el desvío alternativo habilitado que no es eficaz ni cumple las condiciones necesarias.
De lo contrario, la terquedad del Gobierno de España abocará a que los gallegos sigan teniendo durante muchos años únicamente media autovía, demorando la solución definitiva quizás hasta 2028.
Sector transportes
Como consecuencia del colapso, Vázquez ha avisado de que hace demasiado tiempo ya que el tráfico de mercancías se encuentra "con un embudo" cuando llega a Pedrafita. Al respecto, ha apuntado a varios accidentes en los últimos meses por ese trasvase de tráfico hacia la nacional.
Al respecto, la conselleira vaticina que la situación se verá agravada en el invierno y, visto el ritmo de avance en las obras de reconstrucción, entiende que no parece viable que ese primer viaducto pueda estar terminado en 2023.