
Cientos de ganaderos se han concentrado a las puertas de la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Salamanca, una protesta que ha terminado con decenas de los asistentes intentando entrar dentro de las instalaciones y con agentes de la Policía Nacional actuando para evitar la entrada.
Pasadas las 12.30 horas ha comenzado la manifestación y, en torno a las 13.00 horas, cuando iban a entrar representantes de la organización convocante, Unión por la Ganadería, para mostrar su descontento con la inmovilización del ganado, decenas de los presentes han intentado acceder también con vallas y con bastones, con los que han golpeado los cristales.
En estos momentos, los agentes han intervenido para tratar de detener la situación y, tras los primeros instantes, los representantes del colectivo convocante, que ya estaban en el interior, han vuelto a salir para pedir calma.
Los ganaderos protestaban por la inmovilización del ganado ordenado por el Ministerio para luchar contra la tuberculosis bovina. El departamento de Luis Planas tomó esta medida la pasada semana después de que la Junta de Castilla y León flexibilizase algunos de las medidas para el traslado de animales, normativa que finalmente retiró el Gobierno regional.
Precisamente, esta mañana el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) ha acordado suspender cautelarmente la aplicación de la resolución de 10 de mayo de 2023, de la Dirección General de Producción Agrícola y Ganadera de la Junta de Castilla y León, por la que se desarrollaban determinados aspectos de los programas nacionales de enfermedades de los rumiantes, flexibilizando el movimiento de ganado.
La resolución, que cuenta con un plazo de cinco días para interponer recurso de reposición, responde así al recurso contencioso-administrativo puesto por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación contra la resolución de 10 de mayo de la Junta, debido a que, según el Gobierno, contravenía determinados aspectos de la legislación nacional y europea en relación al movimiento del ganado.
De hecho, la Abogacía del Estado fundaba su petición de suspensión cautelar en la "ilegalidad manifiesta de la resolución" por incurrir en "infracción tanto de la normativa europea como de la normativa básica del Estado español". Además, apuntaba que, "de no tomarse la medida cautelar, se habría consumado un daño irreparable sobre la cabaña ganadera española y europea", por el "incremento potencial del riego de contagio de la tuberculosis bovina".
La resolución del TSJCyL señala en su auto que la Junta de Castilla y León no se opuso a la adopción de la medida cautelar y, dado que "ambas partes están conformes en que la ponderación de los actuales intereses en conflicto reclama la adopción de la suspensión", la sala acuerda suspender cautelarmente la orden de la Junta.