La crisis energética ha afectado directamente a los bolsillos de muchos usuarios. Por ello, Octopus Energy ha optado por mantener los precios y ser transparente frente a sus clientes, sin que esto afecte directamente al entorno.
Su objetivo principal es ofrecer energía a sus clientes pero manteniendo su compromiso con el medioambiente y los territorios y comunidades donde opera. En los últimos años, la compañía, de origen inglés, ha llevado a cabo diferentes tareas de voluntariado. Una de las más recientes tuvo lugar el pasado mes de noviembre en Valencia, donde empleados de Octopus y voluntarios retiraron residuos plásticos de todo tipo en la playa La Devesa del Saler. La compañía está 100% comprometida con la energía verde y busca llevar a cabo una transición energética favorable para el ser humano y el planeta. Además, otro de los objetivos planteados por la comercializadora es acercar energía limpia a todos los rincones del planeta.
De hecho, actualmente opera en Europa, Asia, Oceanía y América. Para ello, utilizan tecnologías de última generación como Kraken Flex, empleada para controlar la energía que se distribuye mediante la inteligencia artificial y ajusta la demanda a tiempo real, evitando así el derroche de energía. En esta línea, Octopus también ha optado por participar en uno de los mercados de mayor crecimiento: los coches eléctricos. La empresa ha decidido defender un movimiento sostenible, a través de un servicio completo de asesoramiento, financiamiento e, incluso, suministro e instalación de carga para facilitar el acceso de los usuarios a estos vehículos.
En cuanto al servicio a empresas, la compañía ha conseguido grandes financiaciones a lo largo de todo el mundo. En respuesta, han transformado muchos negocios en 100% sostenibles. En palabras de Al Gore, cofundador de la compañía: "Octopus es la creadora de un sistema sostenible liderado por un equipo que tiene una misión clara".
