
La organización Ecologistas en Acción de Extremadura ha presentado alegaciones al nuevo Plan Integrado de Residuos de Extremadura (Pirex) planteado para 2023-2030, debido a que, tras su revisión, considera que dicho plan "responde más a una declaración de intenciones" que a una planificación elaborada de acciones concretas a desarrollar para la prevención y la gestión de residuos.
Además, muchas de las medidas que se plantean no se acompañan de un presupuesto específico, sino que quedan integradas en presupuestos generales "difusos", con lo cual es "difícil" valorar si las dotaciones económicas son consecuentes con los objetivos planteados.
La organización ecologista ha explicado que en nota de prensa que, en Extremadura, acaba de concluir el plazo del anterior plan de residuos (2016-2022) en el cual se pretendía trabajar en el fomento de las redes de economía verde y circular, específicamente en la producción y gestión de los residuos agroganaderos.
Sin embargo, a fecha de este martes, seis años después, pueden observar cómo la mayoría de objetivos planteados "siguen estando en el tintero", de manera tal que para prevenir "otro ciclo de incumplimiento en algo tan importante cómo la gestión de desechos", Ecologistas en Acción de Extremadura ha presentado varias alegaciones al nuevo Pirex 2023-2030.
Según la entidad de defensa ambiental, el plan no puede basarse en un listado de recomendaciones a los municipios, mancomunidades u otras entidades locales, sino que debe ser "más exigente" con las entidades competentes, estableciendo objetivos "claros y obligatorios" que se vean acompañados de la financiación, el apoyo técnico y la orientación necesarias para su realización.
Para ello, exponen que es preciso aumentar el equipo especializado en la prevención, detección e inspección de residuos dentro de la propia Administración, con el fin de conseguir el cumplimiento en esta transición de medidas. Así, podrían ejecutarse, si se planificara con la participación activa de los ayuntamientos y mancomunidades, conocedoras de su realidad local concreta, en calidad de generación y análisis de la situación actual de los "múltiples" desechos que se generan, tanto en las ciudades, como en las zonas rurales.
La reutilización de materias primas, el reciclaje y la gestión apropiada de los remanentes orgánicos forma parte de la estrategia europea, por la cual la comunidad extremeña debe aportar medidas de ejecución que permitan su consecución. "Por el contrario, hasta el momento la Junta de Extremadura está aprobando de nuevo un plan, sobre otro que no se ha cumplido y sobre el cual elabora uno nuevo más ambicioso conceptualmente", según la organización, para la que "no parece ni claro, ni realizable".