
Uno de los productos más vendidos de Starbucks son los frappuccino, una bebida hecha a base de café y hielos con ciertos aditivos como nata o sirope. Por tanto, defender a uno de sus buques insignia es algo clave para la cadena estadounidense, hasta tal punto que esto le ha llevado a demandar a una cafetería india por apropiarse del nombre de su producto.
India es el segundo país con mayor población mundial, unos 1.393 millones de habitantes, lo que hace que sea un mercado muy jugoso para cualquier compañía. Starbucks posee 268 tiendas repartidas en 26 ciudades del país. Uno de sus competidores indios, LOL Café, contaba en su carta con una bebida que perfectamente se podría encontrar en cualquier local de la empresa americana, hasta con el mismo nombre, "Brownie Chips Frappuccino". En 2018, la compañía fue consciente del uso - sin su permiso – de su bebida y acusó a la cafetería de intentar hacer pasar a sus productos por los estadounidenses.
La empresa india decidió ignorar los avisos de Starbucks con lo que el asunto acabo en los tribunales. A finales de noviembre de este año, el tribunal superior de Delhi prohibió a LOL Café el uso de la marca registrada Frappuccino debido a que con esta utilización se "pretende engañar a un consumidor incauto". Al mismo tiempo, el juzgado interpuso una compensación económica de entorno a 16.000 dólares en concepto de gastos de litigio.
No es el primer caso al que se enfrenta la compañía estadounidense. En 2020, un tribunal japonés desestimó un recurso para invalidar el nombre de una marca de té de burbujas llamada Bull Pulu Tapioca y, en 2013, perdió contra un vendedor de café estadounidense que comerciaba la bebida "Charbucks". Sin embargo, no todo siempre le salé siempre mal a la americana y este año, ganaron la batalla judicial contra un intento de inscripción por parte de una marca con un logo circular similar al suyo con el nombre de "Coffee rocks".
Algo curioso es que, a pesar del empeño de la compañía por defender su marca Frappuccino, está realmente no es una creación suya. En 1992, el propietario de la cafetería Coffe Connection de Boston pidió a su equipo de marketing una nueva receta. De ahí salió la mezcla de leche, café y hielo que dándole una textura suave y cremosa se convirtió en todo un éxito en la ciudad, duplicando el negocio de la marca. Tan sólo dos años después de esto, Starbucks compró la cadena de cafeterías por 23 millones de dólares.