
¿Qué es 'Sober October' (o "Octubre Sobrio")? Es un mes del año en el que muchas personas se comprometen a no consumir ni una gota de alcohol, durante los 31 días que dura. A parte de la clarividencia que implica no sufrir los efectos del alcohol en el cuerpo, muchos experimenta también beneficios físicos y mentales.
Hilary Sheinbaum, autora de El desafío seco: cómo abandonar la bebida para el Enero Seco, el Octubre Sobrio y otros meses sin alcohol, tomó en 2017 la decisión de eliminar el alcohol de su dieta durante al menos un mes cada año de su vida.
Ella siempre participa en el desafío de enero, a veces practica el de octubre, o simplemente escoge entre el mes que más le apetezca. Así, con numerosos meses sin alcohol de experiencia, afirma que ha experimentado beneficios en la salud como mejor calidad de sueño o una piel más brillante.
Estas son las mejorías que ha notado al no beber durante uno o dos meses completos al año:
Calidad del sueño
Antes de participar en su primer mes seco, la misma atribuía su falta de sueño a horas de trabajo particulares, a horarios frenéticos o al estrés. "Como una neoyorquina ocupada, que a veces siente la adrenalina con intensidad, yo pensaba que simplemente era una mala durmiente".
Pasó de dormir entre cuatro horas y media y cinco de media al día, a dormir siete o ocho en el siguiente mes, durante su primer Enero Seco. "Lo único que cambié fue consumir menos alcohol. Hacía el mismo ejercicio, tenía la misma cantidad de trabajo y obviamente el tiempo era el mismo", aclara Sheinbaum.
Algunos beneficios concretos que experimentó en el sueño fueron:
-Habilidad para dormir a lo largo de la noche.
-Sentirse menos irritable por la mañana.
-Levantarse con mayor sensación de descanso.
"Si estás agotado, serás menos productivo y por tanto menos feliz. Afecta a toda tu jornada", sentencia.
Salud en general
-Una mayor salud cutánea: en los 10 primeros días de su primer mes sin alcohol, Sheinbaum notó una gran diferencia en su piel, que se veía entonces más brillante y menos deshidratada.
-Salud mental positiva debido a la seguridad financiera: comprar bebidas en Nueva York es para ella un hábito caro de mantener. Al reducir (y en un mes cortar al completo) la ingesta de alcohol, la misma pudo recortar algunos de sus gastos.
-Mayor seguridad física: pedir Ubers y servicios similares tras reuniones sociales era una práctica mucho más segura cuando no estaba bajo los efectos del alcohol. En esos meses concretos, le preocupaba menos la idea de volver a casa tras la fiesta.
-Mejor dieta: Sheinbaum se deshizo de las calorías vacías que aporta el alcohol, así como el exceso de azúcares. También notó que le apetecía mucho menos adquirir comidas y 'snacks' poco saludables al estar sobria.
Las bebidas no alcohólicas
Hilary Sheinbaum anima a la gente a probar uno de estos períodos sin alcohol para toda aquella persona a la que la idea le resulte curiosa. Esto no quiere decir que se deban evitar las reuniones sociales con amigos o compañeros, sobre todo ahora que los cócteles vírgenes y otras bebidas sin alcohol son cada vez más frecuentes en bares y restaurantes, afirma.
"El espacio que ocupan las bebidas no alcohólicas ha evolucionado tanto, que realmente hay opciones para todos los gustos", comenta Sheinbaum.