Madrid
El 22% de los 'millenials' (cuya edad se sitúa actualmente entre los 26 y los 41 años) y el 19% de los 'Z' (entre 18 y 25) han contraído deudas debido a sus gastos en citas, según un estudio para el mes de septiembre de Lendingtree. Además, el 77% afirman que las citas serían más sencillas si contasen con más dinero, y algunos aseguran tener menos de estos encuentros por culpa de la inflación.
Los encuestados aseguran gastarse de media 91 dólares en una noche fuera, con diferencias entre sexos: las mujeres dijeron que de media se gastarían 81 dólares, mientras que los hombres, por su parte, hablan de una media de 104 dólares.
"Todo se está volviendo más costoso", asegura el analista de crédito de LeadingTree, Matt Schulz, en el informe. "No solo son la ropa, las rosas, el vehículo compartido o las cenas... está pasando con todo". El mismo añade que: "El coste extra de estas cosas individualmente no supone algo desorbitante, pero si se unen todas ellas, se convierten en algo notorio".
¿Por qué puede suponer un problema?
Como con los gastos en general, la partida que se dedica a tener citas puede ser complicada de monitorizar. De acuerdo con Michael Liersch, jefe de planificación para la gestión de riqueza e inversión de la compañía de servicios financieros Well Fargo, "los humanos son conocidos por su imprecisión a la hora de llevar las cuentas de su dinero mentalmente, tanto en términos de cantidad gastada como con el límite de gasto".
Liersch advierte: "Esa combinación puede crear unas dinámicas a final de mes en las que, cuando vas a pagar tu renta, servicios u otras facturas, te das cuenta de que tus citas están haciendo que gastes de manera que te estés endeudando".
El uso de tarjetas de crédito o aplicaciones de pago puede llevar a las personas a sumergirse en una espiral de citas, sin que se den cuenta de cómo se acumulan sus gastos, añade Liersch. "Si tienes unos límites de crédito relativamente altos, y si sueles pagar lo mínimo, puede que no te des cuenta de esto durante meses".
Algunas soluciones sin renunciar a las citas
Liersch sugiere que crear un presupuesto tangible puede ayudar a la hora de asegurarse de que las finanzas personales no sufren por gastos extra, como lo son las citas. Para seguir de cerca los desembolsos, una opción es comenzar cada mes con un presupuesto ya preparado, en el que figure el gasto máximo mensual para esa partida.
El analista de industria en Bankrate.com, Ted Rossman, recomienda "ser honesto con el presupuesto que se tiene" con la persona con la que se está. El mismo añade que: "No creo que sirva de mucho el contraer deudas por esto. No es sostenible".
Aunque pueda ser tentador gastar de más para impresionar a la otra persona, algunos planes de bajo presupuesto como visitar museos o cocinar en casa son buenas alternativas. Cerca del 85% de los que respondieron a la encuesta de Lendingtree afirman no sentirse molestos si la otra persona prepara una cita de bajo presupuesto.
