
A Viernes de Dolores, ya podemos saber con bastante certeza el pronóstico para todo lo que resta de Semana Santa. Y a grandes rasgos, las noticias son buenas para quienes busquen el buen tiempo: por lo general, solo lloverá durante los primeros días de la próxima semana.
De esta forma, los días grandes de la semana (Jueves Santo, Viernes Santo y Domingo de Resurrección) contaríamos con temperaturas agradables, incluso elevadas en algunas zonas, y cielos con pocas nubes, sin rastro de lluvias. No obstante, habrá que permanecer atentos durante los próximos días para despejar cualquier duda.
Sábado 9 de abril
Como ya se esperaba, la llegada de un frente dejará abundante nubosidad desplazándose de noroeste a sudeste a lo largo del día, así como algo de nubosidad de evolución en el interior, según datos de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
En el Cantábrico, alto Ebro y Pirineos se esperan lluvias débiles, mientras que en amplias zonas de la Meseta, sistema Ibérico y Cataluña son probables precipitaciones dispersas moviéndose de noroeste a sudeste, sin descartarlas aisladamente en sierras del sudeste. En cualquier caso, al final del día la nubosidad tenderá a disminuir y a remitir las precipitaciones en general.
Domingo de Ramos (10 de abril)
En la mayor parte del país dominará el tiempo estable sin precipitaciones. Sin embargo, a medida que avance el día aumentarán las nubes y los chubascos en el entorno de Galicia, tras la llegada de un frente asociado a la borrasca Evelyn.
Asimismo, en sierras litorales y prelitorales de Cataluña y norte de la comunidad Valenciana, sistema Central y Cantábrica occidental se esperan intervalos nubosos con probables precipitaciones dispersas ocasionales. En el resto de la Península, intervalos de nubes altas.
Las temperaturas máximas descenderán en el zona mediterránea, mientras que ascenderán en el resto de la Península. Las mínimas en aumento en el noroeste y tercio sur, predominando los descensos en el resto.
Lunes 11 de abril
Se prevé que el frente atlántico, asociado a la borrasca Evelyn, transite la Península de oeste a este con cielos nubosos o cubiertos a su paso y precipitaciones generalizadas, acompañadas de tormentas ocasionales, en algo más de la mitad oeste peninsular y el Estrecho.
Pueden ser localmente persistentes en Rías Bajas y oeste del sistema Central, y son menos probables cuanto más hacia el este, sin esperarse en la fachada oriental o Baleares. En Canarias, solamente hay probabilidad de precipitaciones en el norte de las islas de mayor relieve.
Martes 12 de abril
El frente continuará transitando la Península de oeste a este con cielos nubosos o cubiertos a su paso y precipitaciones generalizadas, acompañadas de tormentas ocasionales. Se prevén abundantes y más intensas en la mitad oriental, Estrecho y Alborán y en general dispersas en la occidental, aunque también serán abundantes en Rías bajas, sin descartar el sudoeste.
En el tercio oriental podría haber polvo en suspensión y las precipitaciones irían acompañadas de barro. A lo largo del día, irán remitiendo en la mitad occidental peninsular de oeste a este, siendo algo más persistentes en el litoral occidental de Galicia. En Canarias, intervalos nubosos sin descartar alguna llovizna aislada ocasional en el norte de las islas de mayor relieve.
Las temperaturas descenderán de forma casi generalizada con el paso del frente, aunque aumentarán en el área mediterránea oriental.
Miércoles 13 de abril
Un nuevo frente atlántico producirá nubosidad y precipitaciones tanto en Galicia como en el Cantábrico, siendo también probables chubascos ocasionales en Pirineos, norte del área mediterránea y Baleares.
Las temperaturas tienden a recuperarse, aumentando de forma casi generalizada, de forma acusada en el interior peninsular.
Jueves, Viernes y Sábado Santo (14, 15 y 16 de abril)
Se prevé que un anticiclón provoque estabilidad, con cielos poco nubosos o con nubes altas. Sin embargo, existe una baja probabilidad de precipitaciones en el extremo norte peninsular, litoral sureste y Baleares.
Las temperaturas tienden a recuperarse, aumentando de forma casi generalizada, de forma acusada en el interior peninsular.