
elEconomista publica por segundo año consecutivo el ranking de las mayores empresas no financieras españolas. Una guía imprescindible para conocer qué compañías progresan adecuadamente y cuáles se quedan rezagadas, con la garantía y la solvencia que ofrece Informa, una sociedad pública perteneciente a CESCE.
Un rápido vistazo al ranking muestra cómo las empresas energéticas copan los primeros puestos de la clasificación, mientras que destaca la apabullante ausencia de empresas tecnológicas. Con la excepción de Telefónica y quizá de Amadeus, el ranking está integrado por sociedades pertenecientes en su mayoría a los servicios.
Por número de sociedades, son las del sector agroalimentario las más numerosas en el conjunto del ranking, un sector que encabeza las exportaciones españolas, por delante de las automovilísticas, que están entre las más grandes por tamaño.
Si esta foto la hubiéramos hecho hace unos años, probablemente el sector constructor emergería como uno de los más pujantes de la economía. En esta ocasión, solo ACS figura entre las diez primeras. Ferrovial luce en el puesto duodécimo, Abertis en el vigésimo sexto, mientras que FCC se va al trigésimo cuarto. El estiloso mundo de la moda y del textil se hace un hueco gracias a Inditex en el quinto lugar y de El Corte Inglés, en el décimo.
Nunca llueve a gusto de todos. Pero que cinco de las diez grandes sociedades sean de carácter energético es un signo del espléndido futuro que espera a nuestras multinacionales, en un mundo donde las energías limpias y sostenibles están llamadas a convertirse en dos de los motores que moverán el planeta en las próximas décadas.
Las grandes petroleras encabezaron los ranking por rentabilidad y tamaño en la última década, un puesto que ahora ocupan las tecnológicas como Google, Amazon o Apple. El futuro será de las energías renovables.
España puede pasar así de ser un importador neto de petróleo y gas, lo que lastra nuestra balanza comercial y por cuenta corriente, a uno de los grandes productores y exportadores de energías. Un vuelco que cambiará la fisonomía y las perspectivas de nuestro país.
Por contra, es lamentable la ausencia de empresas industriales como Gestamp, Antolín, Acerinox o Siemens-Gamesa, que como su nombre indica es más germana que española, así como de farmacéuticas: solo está Grifols.
Quería cerrar el repaso a las diez grandes con una mención expresa a Mercadona, un coloso de la alimentación, y rendir homenaje a su presidente, Juan Roig, que junto a Amancio Ortega son nuestros dos grandes emprendedores.