
La batalla por el control de la inmobiliaria Urbem entre su fundador, José Pastor, e Inversiones Mebru, participada por el grupo Cleop y García Ojeda, se ha complicado después de que Pastor anunciara el pasado jueves que ha suscrito una ampliación de capital de 10 millones de euros.
La ampliación, según Pastor, le otorga de nuevo la mayoría accionarial que había perdido en octubre en favor de Cleop, como consecuencia de una sentencia del Tribunal Supremo.
Desde Cleop, las cosas se ven de otra manera. Su presidente, Carlos Turró, manifestó a elEconomista que no tiene "ninguna duda de que la sentencia acabará cumpliéndose", porque Regesta Regum -la empresa de Pastor- "está condenada y no puede ser que un condenado impida que se cumpla una sentencia".
Cleop se apuntó en 2011 una ganancia de 6,68 millones por la sentencia del Supremo, pendiente de ejecución y ahora con una incertidumbre añadida tras la maniobra de Pastor. A pesar de ese beneficio extraordinario, Cleop acabó 2011 en pérdidas, 1,27 millones, que serían superiores si tuviera que dotar la posible pérdida de la mayoría de Urbem.
Según Turró, no es necesaria ninguna dotación, "porque no tengo por qué creer que no soy el accionista mayoritario, y esto lo apoyan tanto Deloitte como nuestros abogados".
La sentencia que anulaba parte de una ampliación de capital de 2006 no se ejecutó porque Cleop, que debía desembolsar 26 millones en 15 días para tomar la mayoría, se encontró las acciones de Pastor pignoradas, por lo que solicitó una aclaración de la sentencia al Supremo. El Alto Tribunal dejó el caso en manos de un juzgado de lo Mercantil, que aún no se ha pronunciado.
Según Pastor, al no haberse ejecutado la sentencia, él tenía derecho a suscribir un tramo de 10 millones de aquella ampliación, cosa que ha hecho e inscrito en el Registro Mercantil de Valencia. Cleop ha anunciado que impugnará la operación.