
El martes 30 de enero tendrá lugar en el Parlament catalán el pleno de investidura en el que Carles Puigdemont intentará ser renombrado presidente de Cataluña. La fecha exprime casi al completo el plazo máximo que Roger Torrent tenía para convocar la sesión y cuyo límite era el día 31 de este mismo mes.
Según ha informado Catalunya Ràdio, el 30 es la fecha elegida para un pleno que se celebrará a decisión de la Mesa en una sola sesión para respetar los tiempos que establece el Reglamento del Parlament y que dice que debe producirse dentro de los 10 días hábiles posteriores a la sesión constitutiva.
A menos de una semana de celebrarse, y con el sistema de votación por decidir, la cita plantea aún otras dudas. La más importante, la que genera la ausencia del candidato de Junts per Catalunya o la viabilidad del nombramiento en la distancia, fórmula en la que insisten JxCat y ERC pero que rechazaron los letrados del Parlament.
Precisamente este miércoles el presidente del Parlament Torrent se ha reunido con Puigdemont en Bruselas para tratar detalles de la investidura como son si el candidato de JxCat se decantará por el nombramiento telemático o si decidirá acudir a la Cámara catalana asumiendo el riesgo de detención. Sin embargo, ninguno de los dos ha aclarado qué postura se tomará finalmente.
Torrent propuso a Puigdemont como candidato único a ser investido president el pasado lunes. Un día después, desde Copenhague, el expresident cesado renunciaba al voto delegado para su sesión de investidura y pedía volver a España sin riesgo de ser detenido.
El Gobierno, sin embargo, insiste en la inviabilidad del nombramiento de Puigdemont y le recuerda que será detenido en cuanto pise suelo español para que afronte las cuentas pendientes con la justicia por el desafío soberanista y que el 155 no se desactivará con la investidura sino con la toma de posesión del cargo.