
El expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha acudido este martes al acto que 200 alcaldes independentistas celebran en Bruselas, donde se encuentra desde la semana pasada, para apoyar al cesado Gobierno catalán. Puigdemont, que ha comparecido durante el acto, ha dado las gracias a todos los asistentes. Además, ha dicho que "España tendrá que responder ante la justicia internacional" por el maltrato que han sufrido algunos miembros del Govern cesado que están en prisión y ha cargado contra la UE por ayudar a Rajoy en "este golpe de estado".
"Gracias por vuestro compromiso a la democracia", ha comenzado diciendo el expresidente de la Generalitat. "Habéis sido alcaldes en todo momento al lado de Cataluña en este proceso, pero sobre todo estáis al lado nuestro", ha añadido. "Sois la pieza fundamental de nuestra arquitectura institucional".
"Nuestro colegas que están en prisión ha sido maltratados por las autoridades españolas y el Estado tendrá que responder ante la justicia internacional", ha añadido. "¿Es esta la Europa que quieres, Tajani? Si los ciudadanos siguen apoyando al Gobierno, al Parlamento que quiere un estado independiente, ¿seguirán ayudando al señor Rajoy en su golpe de Estado?", ha dicho Puigdemont.
El objetivo del evento es "dar la visión desde los municipios de la situación en Cataluña", según la Asociación Catalana de Municipios y la Asociación de Municipios por la Independencia, organizadores del acto.
Recibido al grito de "president"
Los ediles secesionistas han recibido a Puigdemont y a los exconsellers Clara Ponsatí, Antoni Comín, Mertixell Serret y Lluís Puig, con gritos de "president", "consellers", "llibertat" y "Visca Catalunya".
El primero en tomar la palabra ha sido el eurodiputado de ERC Josep-Maria Terricabras, quien ha deseado que los cinco exmiembros del destituido Gobierno catalán "continúen en libertad mucho tiempo".
Los cinco políticos catalanes están en libertad con medidas cautelares en Bélgica por decisión de un juez belga, después de que la Justicia española emitiera una Orden Europea de Detención y Entrega (OEDE) tras ser acusados de los presuntos delitos de sedición, rebelión y malversación de fondos públicos, entre otros.
Entre las medidas cautelares impuestas por el juez belga no hay ninguna en relación a las actividades políticas, por lo que Puigdemont y los otros exconsellers que abandonaron con él España hace una semana han podido acudir a este evento.
Sí tienen restringido salir de Bélgica, vivir en otro domicilio que el comunicado al juez o ausentarse de cualquier convocatoria ante la Justicia. Los cinco declararán ante el juez de primera instancia para decidir su entrega a España el 17 de noviembre.