
Todos los ojos están puestos en la reunión del Banco Central Europeo que se celebrará la semana que viene. Así, las declaraciones de ayer del economista jefe del Banco Central Europeo (BCE), Peter Praet, que anunció que la institución abordará la próxima semana la discusión de cuándo finalizar el programa de compra de deuda, conocido como el Quantitative Easing (QE), han dado alas hoy de nuevo al sector financiero en España, que encabeza las alzas en el Ibex 35: solo en la sesión de hoy las entidades ganan unos 2.500 millones de capitalización en bolsa.
Según la última encuesta a expertos que realiza Bloomberg cada mes y medio, previa a las reuniones del Banco Central Europeo (BCE), los analistas han adelantado su expectativa de subida de tipos al mes de junio de 2019 (a comienzos de semana esperaban que fuera en julio), poco antes de que Mario Draghi, presidente de la entidad, deje el cargo, a finales de ese año.
Además de lo anterior, también tiene mucho que ver el componente político. Como explica Sara Carbonell, de CMC Markets, "desde el punto de vista macroeconómico todo va bien, los movimientos únicamente se deben a razones políticas. Y en ese sentido, el Gobierno que ha fijado Pedro Sánchez, de momento, está bien reconocido, lo que ha provocado que se revaloricen los bancos".
Encabeza las alzas CaixaBank, que ha llegado a subir más de un 5% en la sesión, seguida de Bankia, la más beneficiada por un alza en el precio del dinero y cuyos títulos han llegado a superar también el 4,5% en lo que va de sesión. Por su parte, Bankinter y Sabadell han llegado a subir hasta un 3% mientras que BBVA y Santander se han quedado en el 2,5%.
En el saldo anual, eso sí, algunos de ellos se sitúan entre los valores más penalizados del índice. También en Europa, donde el Stoxx 600 Banks pierde un 9,5% en lo que va de ejercicio.
El euro, pendiente de Draghi
Ante la expectativa de que la subida de tipos puede llegar mucho antes de lo previsto el euro se sitúa otra vez por encima de 1,18 dólares.
Al igual que ocurrió en la sesión de ayer, los inversores se decantan hoy por comprar bancos y vender bonos, a excepción de la periferia. Así, el interés exigido por los inversores al bono español a 10 años se ha relajado desde el 1,50 hasta el 1,43%, mientras que el rendimiento del papel italiano ha bajado del 2,83 al 2,87%.
Al contrario el interés del Bund alemán ronda el 0,51%, su cota más alta de las últimas tres semanas. Lo que ha relajado la prima de riesgo española, que mide la diferencia entre la rentabilidad del bono español de referencia y el alemán, otras vez por debajo de 100, hasta los 93 puntos básicos.