BBVA ha seguido los pasos de Banco Santander al anunciar una reducción del 75% de su red de oficinas en España de cara a los próximos años. Hasta la fecha y desde el estallido de la crisis financiera en el año 2008, las entidades españolas cotizadas han despedido al 3% de su plantilla, en total y a nivel mundial, lo que afectó 11.536 trabajadores.
A esta cifra habría que añadir los trabajadores de cajas de ahorros españolas que también perdieron su puesto durante los peores años de la crisis económica en nuestro país, pero que no están incluidos en los datos recogidos por Bloomberg, que sólo se centra en entidades cotizadas. En el caso de Bankia, por ejemplo, tampoco figura su actividad laboral como Caja Madrid.
Según los últimos datos ofrecidos por el Banco de España sí cifran los despidos acometidos por el conjunto del sistema financiero en nuestro país entre los años 2008 y 2014. El organismo estima que 70.010 personas perdieron su puesto de trabajo en este periodo, sobre un total de 208.291 trabajadores del sector a cierre del mes de diciembre.
De ahí que el dato de despidos ejecutado por la banca nacional cotizada desde la crisis (esos 11.500 trabajadores) pueda resultar una cifra nimia si se compara con el volumen de trabajadores que perdieron su trabajo en el sector financiero a nivel mundial en los últimos nueve años, ya que representa tan sólo un 0,87% de un total de 1,3 millones de personas. Con esta cifra, los bancos se han convertido en el sectorial que más despidos acumula desde el año 2008, según datos reportados por Bloomberg.
Santander y Caixabank
El pasado 1 de abril, la entidad presidida por Ana Botín reconocía su intención de cerrar este año 450 oficinas en España, lo que representa un 13% de su red comercial. Cuatro días más tarde, BBVA ha ido un paso más allá y pretende echar el candado a un 75% de las sucursales que tiene en España.
En ninguno de los dos casos se ha concretado, sin embargo, el número de trabajadores a los que podría afectar esta medida.
Hasta la fecha, Banco Santander es la entidad que más despidos ha llevado a término en sus diferencias filiales, según Bloomberg. En diciembre del año 2008 el banco acometió el mayor número de despidos registrado en los últimos nueve años, cuando 1.900 trabajadores fueron puestos en la calle. En diciembre de 2012, cuatro años más tarde, otras 1.280 personas fueron despedidas dentro del grupo a nivel internacional. En total, 4.830 trabajadores menos.
Por detrás se encuentra CaixaBank, con 4.420 menos empleos en estos años. A lo largo del año pasado, la cifra fue particularmente sangrienta si consideramos los dos procesos colectivos de despido que llevó a cabo la entidad en los meses de enero y junio y que supuso la salida de 1.820 trabajadores.
Los despidos en el resto de entidades españolas ascienden a 1.229 en el caso de BBVA, 401 personas en Banco Sabadell, 350 en Bankinter y otros 306 para Bankia.
Hacia la tecnología Fintech
En enero de este año, la entidad presidida por Isidro Fainé puso en marcha ImaginBank, la denominada 'banca móvil' de Caixabank con el objetivo de acercarse a los más jóvenes e implementar la tecnología dentro del banco.
Según un reciente informe elaborado por Citi, los bancos de Estados Unidos y Europa son los que más lejos se encuentran de ese punto de inflexión frente a otras economías, como la china.
El gigante asiático ya ha dado ese paso y los clientes tradicionales de banca representan un número similar a aquellos de las firmas Fintech, un término anglosajón que aglutina en una sola palabra los términos finance + technology. Es más, China es también el mayor mercado de e-commerce del mundo. De los 1,7 billones de dólares que supone a nivel mundial, 672.000 millones provienen de allí.
La cuestión, dice Citi, es que la transición hacia las compañías Fintech ya se está produciendo, con la colaboración o no de los bancos europeos. Según la firma estadounidense, la inversión en compañías Fintech se ha multiplicado por 10 en los últimos cinco años, hasta representar 19.000 millones de dólares el año pasado, frente a los 1.800 que suponía en 2010.
De cara a la próximo década, el "impacto" o la importancia de esta tecnología sobre los ingresos bancarios experimentará una progresión importante. El año pasado, del total de 850.000 millones de dólares de ingresos que registraron los bancos a nivel internacional, la tecnología Fintech contribuyó en un 1,1% de esa cifra. Para 2023 se calcula que su aportación a los ingresos financieros sea del 17%, sobre un total que, desde Citi, estiman en 1,2 billones de dólares -ver gráfico-.
Industria, transportes y tecnología
Si bien es cierto que el sector financiero ha sido el más traumático en lo que respecta al número de despidos, la diferencia con respecto a las compañías industriales y de transportes es de tan sólo 78.826 personas. Siemens, automovilísticas como Rolls Royce o aerolíneas como Lufthansa o el holding hispano-británico IAG son algunas de las firmas que han ayudado a engrosar la lista de despidos hasta los 1,24 millones en los últimos nueve años. Por detrás se sitúa el sector tecnológico, al haberse deshecho de 915.910 trabajadores durante este mismo periodo.
¿Y dónde quedan las compañías vinculadas a las materias primas? Pese a lo que pueda parecer, la crisis de las commodities es aún reciente y no ha tenido un impacto excesivo sobre sus trabajadores, lo que lleva a pensar que aún podría estar por venir. Firmas mineras y acereras han despedido a un total de 578.000 trabajadores, mientras que petroleras y energéticas hicieron lo propio con otras 295.000 personas, según datos ofrecidos por Bloomberg.