
Era cuestión de tiempo que llegasen. Los depósitos al estilo hipoteca, es decir, aquellos que ofrecen mejores condiciones cuantos más productos adicionales al plazo fijo contrate el cliente ya están aquí. Banco Popular acaba de lanzar un depósito al 5%, solo accesible para los clientes que, además de domiciliar la nómina o pensión con la entidad, contraten un seguro de hogar o automóvil. Y, si echa cuentas, no son tan atractivas como a priori parece.
Suponiendo que el cliente realice el depósito por el máximo importe que permite la entidad, es decir, 6.000 euros, obtendría un máximo de 300 euros al año en concepto de intereses. Y debe tener en cuenta que, buena parte de esas ganancias, tendrían que emplearse en pagar el seguro de hogar o auto que la entidad reclama para poder beneficiarse de ese 5%. Porque de lo contrario, de no cumplir con la vinculación exigida, la rentabilidad cae al 0,5%.
Aún así, ese 0,5% a un año está por encima de lo que ofrecen de media las diez entidades con más cuota de mercado en depósitos en España, que brindan un 0,39% y bajando. La expectativa es que sus retornos tiendan al 0% y que, como ya ha hecho Popular, cada vez sean más entidades las que opten por vincular mayores rendimientos a la contratación de más productos.
El depósito Nómina Gasol, que así ha sido bautizado, permite ser contratado a partir de los 3.000 euros y requiere además que el cliente domicilie una nueva nómina por un importe mínimo de 600 euros y una nueva pensión de al menos 300 euros.
Sin vinculación la rentabilidad es más baja
Desde que arrancó el año, no obstante, la tendencia del sector ha sido la contraria y un buen número de entidades ha optado por reducir los rendimientos de sus imposiciones. Es el caso de Bankinter, que ha pasado de ofrecer un 0,4 a un 0,35% para importes mínimos de 6.000 euros. Hace solo un año, este mismo producto ofrecía un 0,85%. No obstante, para quien domicilie además la nómina, el rendimiento crece hasta el 0,75%.
Otras entidades como Bankia también han reducido el interés de su plazo fijo en las últimas semanas, del 0,35 al 0,3% para vencimientos a trece meses. A un año, su depósito es aún menos atractivo y brinda un 0,2%. La misma rentabilidad que Abanca, que en los últimos tiempos también ha bajado del 0,3 al 0,2% a 15 meses.