
Las acciones de IAG cierran con una caída del 4,7% lastradas por el repunte protagonizado por el petróleo en las últimas sesiones. Los futuros del crudo Brent rebotan un 10% en cuatro jornadas consecutivas al alza.
El queroseno -derivado del petróleo utilizado como combustible de los aviones- supone un tercio del total de los gastos de las aerolíneas. "La recuperación de los precios del crudo eliminaría uno de los vientos de cola más significativos para el sector", ha advertido Credit Suisse en un informe recogido por Bloomberg.
Efectivamente, su abaratamiento en los últimos meses ha sido una de las ventajas de las que han disfrutado tanto IAG como el resto de competidores europeos, junto con la depreciación de la moneda única y el repunte del turismo.
Las previsiones de beneficio de la aerolínea que engloba a British Arways, Iberia y Vueling no paran de mejorar por estas razones y por la reciente adquisición de Aer Lingus. Ahora, los expertos esperan que en 2017 se una al club de las empresas que han logrado alcanzar los 2.000 millones de ganancias, un hito que hasta ahora solo han conseguido ocho firmas de las que componen el Ibex 35.
Estas fortalezas estás detrás de la sólida recomendación de "comprar" que el consenso de mercado emite sobre sus títulos (la mejor del principal selectivo español) y de su comportamiento en el parqué. En lo que va de año, las acciones de IAG se revalorizan un 22% frente al 1% que pierde el Ibex 35.

Desde el punto de vista técnico, Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader, explica que "la superación de las resistencias que IAG presenta a la altura de los 8,10 euros confirmaría un pequeño patrón de continuidad alcista que abriría la puerta a un probable ataque a la zona de resistencia histórica que presenta el valor en los 8,50 euros, cuya ruptura situaría a IAG de nuevo en subida libre absoluta".
Para cumplir con este escenario de reanudación de "la impecable tendencia alcista que define IAG en plazos medios y largos no debería cerrar el hueco que abrió el título al alza a partir de los 7,40 euros, que es la referencia de stop agresiva que podría utilizarse si alguien quiere aumentar la posición en la compañía o quiere incorporarla a su cartera".