El Gobierno podía haber apostado por tratar de reducir la deuda, el déficit y la presión fiscal que paraliza la economía productiva. Pero ha preferido seguir esclavizando fiscalmente a los autónomos, las pymes y las familias de clase media para subvencionar a los ninis.
La ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, anunció que se destinará una ayuda económica, cifrada en 430 euros mensuales, a los jóvenes españoles que no estudien ni trabajen. Aunque dicha ayuda estará supeditada a la obtención de un contrato de formación y aprendizaje.
Supuestamente, el objetivo de este complemento salarial es facilitar la integración de los jóvenes en el mercado de trabajo y a través de la formación. No obstante, se conseguirá el efecto inverso, ya que las subvenciones de este perfil únicamente consiguen crear ciudadanos carentes del valor del esfuerzo, sin mayor incentivo que cobrar el dinero de la propia subvención.
Subvencionar el voto
En realidad, se trata de una manera de subvencionar el voto. Con esta medida, unida a otras subvenciones, los gobiernos logran tejer redes clientelares, que en este caso estará integrada por ninis.
Es lo que ha pasado, por ejemplo, en Andalucía, con las redes clientelares tejidas por el PSOE, que le han permitido "desgobernar" la región durante más de tres décadas.
Descolocando a la izquierda
La decisión de financiar a los ninis es una medida de marcado corte populista, propia de un partido como Podemos. Sin embargo, será desarrollada por el Gobierno del PP; aunque con la firma de Ciudadanos, ya que es una propuesta que el partido naranja incluyó en su programa electoral.
No olvidemos que el partido de Albert Rivera, al objeto de oficializar el pacto PP-Ciudadanos, exigió al Partido Popular incluir en el mismo el complemento salarial para jóvenes. Independientemente que se haya podido modificar con posterioridad algún aspecto en relación al contenido de la medida original
Así, debido a este acuerdo entre PP y Ciudadanos, la mencionada propuesta está contemplada en los PGE 2017, y dotada de una asignación de 500 millones de euros. Sea como fuere, el complemento salarial para los jóvenes se configurará como otra medida más que podrá utilizar el Gobierno del PP para descolocar a la izquierda.
La pseudodemocracia española está degenerándose a marchas forzadas. No solo por la total politización de la justicia, la corrupción política institucionalizada, la falta de preparación de la casta, etc. Sino, porque todos los partidos políticos españoles con representación parlamentaria se han inscrito en una carrera cuya meta es abanderar el populismo.
